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¿Quiénes eran los holandeses asesinados en Sardinal?

Tras 11 meses, OIJ detuvo a 11 sospechosos de cometer asesinato

Por Pablo Rojas | 30 de Nov. 2016 | 8:24 am
Hans Snelders, en la foto, fue uno de los asesinados en esa finca. Cortesía de De Gelderlander

Hans Snelders, en la foto, fue uno de los asesinados en esa finca. Cortesía de De Gelderlander

Hans Snelders y su esposa Sita Dhawtal aparecieron brutalmente asesinados el 4 de enero de este año. Sus cuerpos, en avanzado estado de descomposición,  retrataban un horrendo crimen ocurrido a finales de 2015.

Más tarde, la autopsia determinaría que murieron a balazos y heridas de arma blanca.

Ambos llegaron a Costa Rica desde 2007. Se instalaron en la finca La Flecha, una propiedad ubicada en Sardinal de Puntarenas, dedicada al cultivo de maderas de teca y a actividades agrosostenibles.  

El caso provocó conmoción en Holanda, donde medios de prensa – como De Telegraaf- publicaron extensos reportajes sobre el atroz asesinato.

Junto con Snelders y Dhawtal también fue asesinado el capataz de la finca. Un ciudadano nicaragüense que tenía varios años de laborar para la pareja.

En junio, en presencia de la policía holandesa, el Organismo de Investigación Judicial (OIJ) confirmó que el móvil detrás del crimen sería el robo. Sin embargo, ante la complejidad del caso, los detalles eran escasos. 

La luz al final del túnel apareció este 30 de noviembre, casi 11 meses después, cuando el OIJ detuvo en Barranca y Esparza de Puntarenas a 11 personas ligadas con el crimen. Además, los relacionan con otros violentos asaltos ocurridos en la provincia. 

En los operativos uno de los sospechosos respondió con fuego e hirió en el tobillo a un oficial del OIJ. El sospechoso resultó con una herida en la cabeza, producto del roce de una bala percutida por la policía.

El extenso terreno donde ocurrió el crimen está compuesto por unas 400 hectáreas. Contaba con una vivienda principal y otras 6 más pequeñas, aparentemente ahí vivían los peones que colaboraban en la finca.

La finca La Flecha también recibía visitas de turistas interesados en las actividades productivas que se realizaban.

Con estas detenciones se cerraría el primer homicidio múltiple que sacudió este año.

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