Viaje millonario, hospital de Cartago, salarios y más: Directivos de la CCSS discuten en privado temas que son públicos

Constantemente, la Junta Directiva de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) discute temas públicos en privado. Los directivos recurren a "recesos" durante las sesiones para discutir fuera de cámaras temas que no han sido declarados confidenciales, pero que son relevantes y han estado en el ojo público.

Desde el 20 de julio de 2023, el órgano colegiado acordó que las sesiones se transmitirían en tiempo real, excepto cuando los temas contuvieran información confidencial de los habitantes o de los trabajadores. Sin embargo, desde entonces los directivos encontraron la manera de discutir sin supervisión ciudadana: haciendo uso de los "recesos".

Esta práctica demuestra un modus operandi en la Junta Directiva de la CCSS. Temas relevantes, como viajes, salarios, construcción de hospitales, sistemas informáticos y caso Barrenador, se están discutiendo bajo una figura que no deja rastro. Lo que los directivos deliberan durante los recesos no queda consignado en las grabaciones públicas ni en las actas.

Aquí haremos un repaso de temas en que la Junta Directiva ha discutido en privado, pese a ser no confidenciales y de interés público. La tónica es siempre la misma: hay diferencias de criterio, discuten, piden un receso y regresan con acuerdos listos para votar, por lo que los ciudadanos desconocen la deliberación en temas incluso relacionados con recursos públicos.

El caso más reciente se dio el 25 de noviembre, cuando Edgar Villalobos, representante del Gobierno, solicitó un receso para discutir fuera de cámaras si debían pedir a la Dirección Jurídica de la CCSS un criterio sobre la legalidad del viaje de $13.000 que realizó Mónica Taylor, presidenta ejecutiva, a Malasia sin permiso del órgano colegiado.

Róger Rivera, representante de los sindicatos, presentó una moción para discutir el tema, por lo que la Junta Directiva debía aprobar incluirla en el orden del día. Cuatro directivos votaron en contra: Villalobos, Francisco González, Vianey Hernández y Martín Robles.

Tras el receso, regresaron con los acuerdos ya redactados y cuatro directivos votaron en contra: Villalobos, Francisco González, Vianey Hernández y Martín Robles. A raíz de esta votación seguirá sin conocerse si fue legal que Rodrigo Chaves autorizara el viaje de Taylor mediante un correo electrónico.

Una tras otra

El pasado 24 de junio la situación se repitió con otro tema relevante: la implementación del sistema informático ERP-SAP. En esa ocasión, la exdirectiva Martha Rodríguez, quien representaba a los sindicatos, presentó una moción para que se les presentara diferente información sobre las fallas del sistema.

Juan Manuel Delgado, exrepresentante de los patronos, después de conocer la moción expresó: "Vamos a ver, yo creo que vamos a pedir un receso sobre este tema, unos 5 minutos, por favor, solamente nosotros y por favor se
queda Laura (asesora de Taylor) también".

Después de la pausa fuera de cámaras, Francisco Villalobos, representante del Estado, se opuso siquiera a someter la moción a votación.

Previamente, el 13 de marzo, mientras se disponían a conocer la situación de ese momento respecto a la prestación de los servicios en las áreas de salud administradas por las cooperativas del caso Barrenador, Taylor pidió un receso. Al regresar, Martín Robles anunció que se abstendría de participar en la discusión por ser representante de las cooperativas.

En la sesión 9500, celebrada el 4 de marzo, fueron múltiples las pausas que realizaron mientras se discutía el futuro del hospital de Cartago.

Cuando se disponían a decidir si la Junta Directiva continuaría encargándose del tema o si este se trasladaría a la Junta de Adquisiciones, la presidenta ejecutiva dijo:

"Para esto voy a pedir un receso de 10 minutos para que conversemos un momentito los miembros directivos".

Pero, ese receso no tardó 10 minutos; en realidad fueron 45, tal como se puede verificar en la transmisión en vivo de la reunión. Al regresar, simplemente tomaron los acuerdos; es decir, la discusión quedó fuera de cámaras y no consta en el acta de la sesión.

El pasado 27 de febrero ocurrió lo mismo mientras se discutían los temas de Edus, prestación de servicios de salud y salario de los médicos especialistas. En múltiples ocasiones, Taylor pidió recesos antes de la toma de acuerdos importantes.

Ese día, una vez más, Taylor abusó de la figura del receso. "Voy a hacer un receso de diez minutos, un momentito con los directivos, y ya ahorita continuamos", aseguró. El espacio se extendió: esta vez tardó una hora y doce minutos. Al volver, rechazaron de inmediato un informe de la Gerencia Médica sobre la prestación de servicios.

Justamente antes de analizar y discutir una reforma para el salario de los especialistas, Taylor pidió un receso de 18 minutos. Al regresar, se presentaron los criterios técnicos y una serie de acuerdos para ajustar los montos; pero, antes de la votación, nuevamente Taylor hizo una pausa de 28 minutos, pese a que había dicho que serían solamente cinco. Al regreso, no hubo discusión y todos los directivos votaron a favor.