Caso David Guzmán: ¿por qué bajar tan rápido de peso puede generar una lesión?
El experimentado jugador salió entre lágrimas tras el juego ante Pérez Zeledón el sábado
Aunque aún no se conocen con precisión los detalles de la lesión sufrida por el mediocampista David Guzmán durante el triunfo del sábado de Saprissa ante Pérez Zeledón, destaca el hecho de estar vinculada a la drástica pérdida de peso que experimentó en poco tiempo.
Tras finalizar el encuentro ante los generaleños, el técnico Paulo César Wanchope advirtió: "Es contraproducente también el hecho de perder peso muy rápido, porque se toma el riesgo de lo que está pasando", al referirse a la situación del experimentado jugador.
Guzmán redujo considerablemente su peso para encarar el torneo de Apertura 2025, cambio evidente incluso en las fotografías previas al inicio del campeonato.
¿Por qué resulta riesgoso perder peso con tanta rapidez, especialmente en el alto rendimiento?
El fisioterapeuta y doctor Francisco Molina explicó que una reducción brusca de peso puede provocar efectos negativos sobre la estructura física del deportista.
"La pérdida de peso súbita puede favorecer la disminución de masa muscular, lo que reduce la protección y estabilidad articular, además de afectar la coordinación motora. Esto puede generar desbalances biomecánicos como alteraciones posturales, desalineaciones y sobrecargas articulares", dijo.
Por su parte, el nutricionista y entrenador físico Sebastián Cartín detalló las consecuencias de una estrategia de adelgazamiento acelerada sin el enfoque adecuado.
"Al diseñar un plan nutricional, sobre todo para un deportista, debe aplicarse un déficit calórico moderado. Un recorte demasiado agresivo tiende a provocar pérdida de masa muscular en lugar de grasa, lo que resulta perjudicial. Lo ideal es reducir la grasa corporal sin comprometer la masa magra. Si se pierde músculo en un corto plazo y, al mismo tiempo, se mantiene una carga alta de entrenamientos y partidos, una lesión puede estar a nada de psar", explicó.
Dolencias como tendinitis o molestias articulares suelen presentarse en este tipo de escenarios.
"Otra consecuencia de una pérdida rápida de peso es el cambio en el centro de gravedad y equilibrio. El sistema neuromuscular necesita tiempo para adaptarse, y durante ese proceso pueden ocurrir torceduras, caídas, inestabilidades articulares y alteraciones en la propiocepción", mencionó Molina.
Ambos especialistas coinciden en que, cuando se toma la decisión de reducir peso de forma acelerada, el proceso debe realizarse bajo una supervisión estricta y continua para evitar consecuencias físicas adversas.