Celso Gamboa pidió evaluación de Medicatura Forense por mordida de rata en máxima seguridad
Fuentes judiciales confirmaron que posterior a que médicos de La Reforma desmintieran mordedura, el extraditable intentó un "segundo criterio" de médicos forenses
El exministro, exmagistrado y extraditable Celso Manuel Gamboa Sánchez habría solicitado una revisión por parte de la Clínica Médico Forense del Organismo de Investigación Judicial (OIJ), tras alegar que fue mordido por una rata en su celda del módulo de máxima seguridad en el centro penal La Reforma.
El pasado domingo 13 de julio, el exfuncionario fue valorado luego de afirmar que había sido mordido por un roedor. No obstante, de acuerdo con el Ministerio de Justicia y Paz, el personal médico de la cárcel determinó que la lesión identificada no era compatible con una mordedura.
Fuentes judiciales confirmaron a CR Hoy que, tras el incidente —ocurrido hace un par de semanas—, Gamboa intentó gestionar una segunda opinión médica por parte de especialistas en Medicatura Forense.
La intención del extraditable era que los médicos se desplazaran hasta el área de máxima seguridad para revisarle la mano y la presunta mordedura.
El OIJ recibió una solicitud para hacerlo así, en lugar de que lo atendieran en el Complejo de Ciencias Forenses en San Joaquín de Flores. Sin embargo, la visita nunca se concretó.
Días después, durante el juicio que enfrenta por el presunto delito de tráfico de influencias, el propio Gamboa se refirió públicamente al tema:
"Se me hace un escarnio, cualquier cosa que me pasa en el centro penal es publicada en medios, hacen memes y chotas. Hace dos semanas me mordió una rata gigante en la mano mientras estaba durmiendo y todavía estoy en tratamiento.
Ese mismo domingo, ya era noticia y no había nadie en La Reforma. Era domingo, o sea salió de la misma policía. La policía me toma fotografías en mi celda, o sea una fuerte privación de algunos derechos que yo tengo, sé que estoy privado de libertad por la detención provisional y así se estableció por 60 días.
Sé que puede prorrogarse también, pero estoy privado de libertad, no del resto de mis derechos", señaló el extraditable durante una declaración ante los jueces.
Autoagresión y paralización del juicio
Esta semana, surgió también otro supuesto episodio de salud. El martes, Gamboa se autoinfligió una herida dentro de su celda la noche del martes.
El miércoles, la administración penitenciaria emitió un comunicado en el que confirmó que, cerca de las 9:00 p. m. del martes, Gamboa reportó una lesión leve. Al ser abordado por la Policía Penitenciaria, manifestó que no requería atención médica.
Según el Ministerio de Justicia, fue el propio Gamboa quien indicó verbalmente que se había provocado una autoagresión en la muñeca izquierda. La zona presentaba un enrojecimiento leve, tipo rasguño o laceración superficial, sin sangrado ni signos de inflamación.
De acuerdo con la administración carcelaria, el exmagistrado explicó que el acto tenía como finalidad llamar la atención sobre una solicitud relacionada con la iluminación de su celda.
"Al constatar que esa era su petición, se procedió como corresponde en ese sentido y la solicitud del extraditable Gamboa Sánchez fue atendida con el respeto a sus derechos.
Asimismo, la Policía Penitenciaria al igual que con todas las personas privadas de libertad, garantiza una atención trasparente y acorde a los derechos humanos en general", indicó el reporte remitido a prensa ante la consulta de varios medios de comunicación.
La mañana del miércoles, al regresar a juicio, Gamboa solicitó una valoración médica. Ese mismo día debía declarar la principal testigo del caso: la fiscala Natalia Rojas Méndez, quien —según la acusación— habría recibido presiones por parte de Gamboa y de la exfiscala Berenice Smith para excluir el nombre del exalcalde Johnny Araya Monge de una causa penal tramitada entre finales de 2015 e inicios de 2016.
No obstante, el juicio fue interrumpido justo durante el desarrollo de la prueba testimonial. Los jueces informaron públicamente que la suspensión se debió a "circunstancias personales de uno de los intervinientes", sin detallar a quién se referían ni cuál fue la razón específica.
CR Hoy pudo confirmar, a través de tres fuentes independientes, que Gamboa fue valorado esa mañana por personal médico dentro del salón de juicio, antes de que se permitiera el ingreso del público y de los medios de comunicación.
A solicitud de su defensa, la audiencia fue declarada privada para atender lo que el tribunal calificó como una situación relacionada con "la vida privada" del imputado.
Durante ese espacio, se expuso la existencia de una supuesta herida que, según el propio Gamboa, le impedía continuar con el juicio. Ante ese planteamiento, el tribunal autorizó el ingreso de un paramédico para valorar su estado de salud.
El personal médico provenía de la Sección de Cárceles del OIJ, entidad encargada de la custodia de personas privadas de libertad que asisten a tribunales.
Una fuente confirmó a este medio que la lesión alegada por el extraditable no era más que un "raspón", sin signos de mayor gravedad ni complicaciones médicas.
Durante los alegatos relacionados con las "circunstancias personales", la defensa de Gamboa también denunció supuestas torturas que el imputado asegura sufrir en el módulo de máxima seguridad de La Reforma.
La autolesión fue el motivo que llevó a la suspensión del juicio contra Gamboa y otros dos exfuncionarios, precisamente el día en que debía comparecer una de las testigos clave del proceso.