Cocina y Amor: Pareja superó pruebas para crear su propio emprendimiento

El camino los juntó de la forma más inesperada, ahora esta pareja conformada por Yuselyn y Rogelio viven una historia que va más allá del amor y los negocios, si no que se trata de enfrentar estigmas culturales hasta superar los obstáculos.

Yuselyn Granados conversó con CRHoy.com y contó su historia de amor y cómo lograron mantener un emprendimiento propio a pesar de las adversidades que tuvieron que enfrentar.

"Nosotros nos conocimos hace 14 años. En ese momento, yo era mamá soltera con un hijo de 3 años.

Había comprado algunas cosas y por necesidad, tuve que buscar cualquier trabajo que me permitiera coordinar con una guardería, ya que los trabajos que tenían horarios hasta tarde en la noche no era compatible con la guardería", mencionó Granados a este medio.

Recuerda que ella conoció a Rogelio, su pareja, cuando este la contrató para un negocio de batidos y que poco a poco comenzaron a acercarse y a sentir cariño mutuo.

"Fui a una entrevista para un trabajo, aunque no tenía experiencia. A pesar de eso, me eligieron y empecé a colaborar con ellos en 2010. Después de unos meses, el socio se retiró, lo que generó algunos conflictos con el papá de mi pareja. Sin embargo, superamos esas dificultades", agregó.

Poco más de un año después, ellos comenzaron a salir; sin embargo, debían hacerlo en secreto, ya que ni la familia de Rogelio —quienes son de origen chino— ni sus padres, aceptaba la relación debido a ser muy tradicionalistas.

"Pasaron 7 años y estuvimos a escondidas hasta que un día él me dijo: "Ya no puedo más, te amo profundamente y aunque mis padres me deshereden, quiero pasar el resto de mi vida contigo"", recordó Granados.

En ese momento y con todo en contra, tomaron la decisión de irse a vivir juntos y fruto de ese amor nació una niña a la que llamaron Akane. Además, juntos montaron un restaurante buscando salir adelante a pesar de las pruebas.

"Sus padres lo desheredaron y los míos no estaban muy contentos, a pesar de todo trabajamos juntos y sacamos adelante el negocio de comida china. Inicialmente nos fue bien, pero enfrentamos desafíos económicos y críticas.

Nos echaron de un local y enfrentamos dificultades financieras, no teníamos a donde ir estábamos empezando la pandemia, solo dependíamos de ese local", mencionó la emprendedora.

En ese momento fue que su suegra le dijo a la pareja que se quedaran en el apartamento que tenían a la par de su casa, ya que pagar un alquiler les resultaba imposible debido al cierre del negocio. Aunque, según cuenta Yuselyn, siguió insistiendo a que Rogelio se casara con una china.

"Pasó el tiempo y como no conseguíamos un local, le pedimos a ella que si nos ayudaba un poco más con el local para así pasarnos ahí porque nos estaban echando del otro.

Así que ella aceptó y conseguimos un préstamo en el banco y remodelamos el local, ha sido muy difícil mantenerlo, hemos hecho de todo, pero aquí vamos de pie una vez más pidiendo a Dios que nos ayude", agregó Granados.

Nuevo comienzo

El restaurante de la pareja se llama Tom Tom Wok y se encuentran ubicados en Moravia Centro, San José, donde ofrecen platillos distintos platillos asiáticos, tal es el caso de baos, noodles, sopas, woks, entre otros.

"Nos esforzamos por ofrecer un servicio de calidad, pensando en lo que nos gustaría recibir como clientes. Queremos que la gente se sienta bienvenida y disfrute de la experiencia en nuestro restaurante. Valoramos la humildad y creemos que cada cliente es especial.

Actualmente, estamos estabilizados y hemos abierto una pizzería. Queremos seguir creciendo y, si Dios lo permite, abrir más locales en el futuro. También valoramos la importancia de apoyar a nuestros colaboradores, muchos de los cuales son familiares jóvenes que nos ayudan en el negocio", mencionó Yuselyn.

Todo fue mejorando con el tiempo para la pareja y tras 6 años conviviendo juntos, ya ambas familias están comenzando a aceptar su relación y esperan, en algún momento, poder contraer matrimonio.

"A pesar de las diferencias culturales, nos adaptamos y aprendimos a trabajar juntos.

La familia de mi pareja, de origen chino, al principio no aceptaba nuestra relación, pero con el tiempo, nos aceptaron como familia. Hemos aprendido a acoplarnos a la cultura china y valoramos sus tradiciones", concluyó la emprendedora.

Además, Yuselyn dejó un mensaje final para todas aquellas personas que buscan cumplir sus metas y sueños a pesar de las adversidades:

Les diría que siempre hay oportunidades para salir adelante. Es importante tener sueños y esperanzas. Cuando una puerta se cierra, hay que buscar otras oportunidades. Trabajar con amor y cariño, tener humildad y creer en Dios nos ha ayudado a superar las dificultades

Tengan sueños y esperanzas, y que no se rindan ante las adversidades. Trabajar con amor, cariño y humildad nos ha llevado a superar muchos desafíos. Siempre agradecemos a Dios por cada pequeña bendición y oportunidad que se nos presenta, dijo la emprendedora.