De periodista a actriz porno: Ella cambió su profesión por un oficio más “revelador”
"Esta es una sociedad hipócrita, de doble moral"
Cuando nació, sus padres la nombraron Alejandra Omaña y así destacó como periodista en su natal Colombia. Sin embargo, con tan solo 24 años se cansó de trabajar en ello y se dedicó a la industria pornográfica como "Amaranta Hank".
"Esta era una decisión de tenía aplazada por temor a lo que pudiera pensar la gente, mi familia, pero a finales del año pasado sentí que ya había terminado un ciclo en el periodismo y opté por hacer lo que siempre me había gustado: la pornografía", reconoció al medio RT.
Hace algún tiempo, Alejandra prometió que se desnudaría si su equipo lograba clasificar en su país. Para sorpresa de muchos así fue y tuvo que quitarse la ropa. Allí empezó todo.
Luego de un sinfín de situaciones, Omaña se trasladó de una ciudad fronteriza con Venezuela hacia Bogotá y allí grabó sus primeras escenas como actriz porno.
Vestida de monja, se masturbó ante las cámaras y eso le costó el distanciamiento con su familia, el regaño de su madre y tener que pasar las navidades y fiestas completamente sola.
"Yo hablaba con mi mamá y le decía: ‘usted me está juzgando porque metí elementos religiosos en el video, pero en Cali un cura violó a un montón de niños y el sacerdote dijo que la violación había sido por culpa de los niños y de los padres'. Eso sí está bien para ella. Por eso insisto en que esta es una sociedad hipócrita, de doble moral, que es absurda, ¿sabes? A mí eso me vale nada. Si yo seguía prestándole atención a lo que la sociedad quería para mí, o lo que mi familia quería para mí, iba a terminar suicidándome segurísimo", reconoció.
Para la periodista, el público ha logrado entender que hacer pornografía no la hace menos persona y cree que la gente se ha vuelto más respetuosa.
"Yo creo que la buena pornografía es educación sexual por excelencia porque nosotros replicamos lo que hay allí, porque nadie más nos enseña qué se hace cuando se tiene una relación sexual y consumimos el porno porque es intentar reproducir lo que está allí para ver si nos va bien", explicó.
El sexo no debe verse con vergüenza
"El sexo es una necesidad biológica. No sé por qué nos avergonzamos de algo que nos trajo al mundo; si eso es tan malo, es malo procrear y es mala nuestra existencia en el mundo. En Colombia se avergüenzan de hablar de sexo pero no de la delincuencia, de la pobreza, de la desigualdad, los niños que están pidiendo en las calles o los niños desnutridos en La Guajira. La hipocresía sí es un problema", dijo.
Próximamente, "Amaranta" grabará un video porno con un exguerrillero, como una especie de contribución a la paz de su país.
"A la hora de la verdad, cuando ellos vayan a buscar trabajo en una empresa les va a costar mucho por el prejuicio que ya hay en su contra, pero creo que involucrarlos en la pornografía es permitir que los vean como uno más, que es como darles la bienvenida a la sociedad", citó.
También, escribirá un artículo en el que hablará del por qué hay que respetar a una actriz porno.
"Ser una persona debería ser suficiente, sólo por eso merecería el respeto absoluto. Yo soy depresiva medicada, clínica, y me quería morir todo el tiempo. Mis opciones eran sólo dos: o hacía lo que quería o me suicidaba. Cuando empecé con los videos decidí crear mi propio universo y allí no hay prejuicios absurdos", detalló.