Denuncian penalmente muerte de 2 millones de abejas en Esparza

(CRHoy.com). -La organización Apicultores de Costa Rica informó que se interpuso una denuncia penal en el Ministerio Público por la muerte de dos millones de abejas en Esparza de Puntarenas, hecho que trascendió el pasado 8 de mayo.

El Servicio Nacional de Salud Animal (Senasa) confirmó, a través de pruebas químicas, que la muerte de estos insectos se debió al uso de un químico que las envenenó, llamado fipronil, utilizado para alejar pulgas, garrapatas, piojos y moscas del ganado bovino. Los denunciantes sospechan que un ganadero de la zona fue quien usó el químico en su ganadería, pero tuvo efecto en los insectos, que murieron de forma masiva.

Según la organización, la denuncia se interpuso contra un abogado ramonense de apellidos Quirós Carmona por daño patrimonial y presuntos delitos ambientales. 

"De acuerdo con la denuncia, Quirós Carmona provocó un daño ambiental irreversible de exterminio masivo de abejas que son por imperio legal especies silvestres de dominio público por lo que también es un daño ambiental grave de interés público", dice la publicación que hizo Apicultores de Costa Rica hace algunas horas.

En la quiebra

Camilo Barrantes, copropietario del apiario que se vio afectado, comentó previamente a CRHoy.com que el negocio "quebró prácticamente". Además, explicó que la pérdida de dos millones de abejas se calcula por colmena destruida. En este caso fueron 20 las que se vieron afectadas totalmente. En cada una de ellas habitan, en promedio, 100 mil de ellas y de todo tipo. Esta veintena de colmenas representa una pérdida económica aproximada de ¢10 millones.

La hipótesis que manejan los afectados y otros miembros de la comunidad es que el fipronil usado en una ganadería cercana intoxicó a los insectos que tuvieron contacto directo con el producto. Pero estas abejas también se habrían llevado restos del material a las colmenas, lo que infectó a las demás. Así se produjo lo que llaman "intoxicación masiva". 

El Servicio Nacional de Salud Animal (Senasa) informó a CRHoy.com que se podría abrir un proceso administrativo contra las personas que usaron el producto que podría derivar en una multa. Además, el caso se podría elevar al Tribunal Ambiental Administrativo, para que se determine el daño ambiental causado y considere una compensación.