Don Paco convirtió al reciclaje en un motor de vida
A veces las buenas historias, los momentos especiales y las personas que dejan huella en nuestras vidas, aparecen por casualidad… eso es lo que pasó con Don Paco.
La fotógrafa Ericka López Vargas tomó su lente para capturar al personaje alajuelense que por más de 40 años ha estado detrás de cajas, papeles y sacos.
Hace poco fue el protagonista de la exposición “Don Paco” en el Museo Histórico Cultural Juan Santamaría. El reconocimiento a su trabajo llegó cuando ya don Francisco Cambronero Jiménez tiene 86 años. Como dice el refrán, ¡a buenas horas, mangas verdes!
La ocupación de Don Paco es ser mejor persona y ayudar a otros, buscando un planeta más equilibrado. Un ejemplo de vida útil. Es inspiración, sencillez pura y sabiduría. La bondad le sale por los poros, él da más de lo que recibe. Alegre y de buen ánimo. Admirador de las mujeres: "son más inteligentes que los hombres".
Comenzó con los pies descalzos. Aprendió a sembrar todo lo que se comía.
Es bromista y posee un gran sentido del humor. Confiesa que en segundo año se quedó en francés e inglés,“¡Era mudo!”, dice.
Cuando le pregunté por su esposa, sus ojos se iluminan y nace una sonrisa aún más grande sobre su rostro. Agradece a Dios por haberla conocido. “Hace seis años, tres meses y 15 días que se murió mi señora”. Fue su cómplice en todo. “¡Tuve una suerte increíble!”. Aún lleva su anillo de casado.
A las 8:30 p.m. se acuesta. Y madruga para estar temprano en su trabajo. El reciclaje.
Allí lo espera doña Rosa. Una mujer nicaragüense que trabaja con él.
El reciclar vitaliza. Se vuelve un ser dinámico, enérgico y afanoso. Es orgulloso padre de tres hijos, ocho nietos y tres bisnietos.
No hace plata con el reciclaje, pero vive gracias a él.
Fue el primer proveedor de cartón de Alajuela para la empresa Kimberly Clark. Tuvo una empresa llamada “Reciclando con Don Paco” que luego vendió.
Al lugar de Paco se le puede llevar de todo, lo que para unos es desperdicio o basura, para otros es algo que necesitan.
El sólo quiere un mundo más limpio y mejor…¡y lo está logrando!