Giovanna dejó su país hace 7 años en busca de un mejor futuro para su familia

Hace 7 años, Giovanna Rodríguez dejó la tierra que la vio nacer, Venezuela, para buscar "un mejor futuro" y así fue como llegó a Costa Rica con el corazón lleno de sueños y expectativas. Actualmente, esta madre de gemelos vive en San Antonio de Escazú y se dedica 100% a la pastelería y repostería.

Ella explicó que dejó Venezuela porque en ese momento el país estaba pasando una situación sumamente complicada. "En ese entonces en Venezuela había mucha escasez, no había comida, no había medicina y siempre mi aspiración fue surgir, no quería quedarme ahí y por eso decidimos emigrar".

Para Giovanna, el llegar a un nuevo país fue difícil por el proceso de adaptación. "Todo es diferente, la cultura, pero me encontré con muy buenas personas. Gracias a Dios, empecé a trabajar de una vez (…) Pasé solo una semana desempleada".

Según relató, sus primeros trabajos en el país fueron en tiendas de ropa. Al tiempo de trabajar en tiendas, renunció para finalmente cumplir su sueño de ser mamá. "Anteriormente, ya había tenido 2 pérdidas. Quería dedicarme al embarazo y disfrutarlo al máximo", expresó.

Después de 6 meses de dedicarse a ser mamá tiempo completo de sus gemelos Santiago y Christopher, comenzó a sentirse frustrada y estancada, por lo que le dijo a su pareja que quería producir. Su compañero le dijo lo pensara porque iba a ser mucha carga, trabajar y ser mamá.

Una de las preocupaciones era que yo quería ser una mamá presente, yo no quería meterlos a una guardería y yo tener que trabajar y que ellos pasen tanto tiempo sin mí, yo quiero estar con ellos. Me puse a pensar qué podía hacer, algo que me generara algún ingreso extra. Recordé que cuando yo trabajaba en las tiendas de San José, hacía arepas para vender, hacía torta de piña, entonces yo pensé ‘¿por qué no me pongo a vender tortas?'.

Desde que Giovanna era una niña, veía a su madre haciendo postres, quien vendía ‘quesillo', tortas, tres leches y ella fue quien le brindó las recetas para que hoy en día Giovanna haga sus deliciosas creaciones.

Ella me las envía, entonces yo la hago (torta de piña) y todos los que vivían conmigo la prueban y me dicen ‘está super rica'. Entonces le tomé fotos, empecé a publicar y los pedidos comenzaron a llegar.

En un inicio Giovanna aceptaba pedidos de un día para otro, lo que empezó a complicársele porque no lograba organizar su vida como mamá y emprendedora y por esto ahora trabaja por encargo. 

"Nunca imaginé llegar a tener tantos clientes y que la gente estuviera tan conforme con mi trabajo", dijo Giovanna.

Giovanna le recuerda a todas las personas la importancia de luchar por los sueños. Comentó que el sueño de ella es tener una cafetería."Yo sé que más adelante se me va a dar, yo sé que puedo".