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Esta es la macabra historia detrás del “carnicero de Rostov”

Por Agencia | 3 de Mar. 2017 | 12:56 pm

Screen Shot 2017-03-03 at 11.47.16 AMSi usted lee el nombre de Andrei Chikatilo quizás no le diga nada, pero su historia es tan macabra como cualquier película de terror y por eso le llaman el carnicero de Rostov.

En España, el programa de radio "Elena en el país de los horrores",  dirigido por la periodista Elena Merino hace un repaso sobre este caso y otros relacionados con criminología e historia que han conmocionado al mundo. Esta semana, el caso es el de Chikatilo y el podcast ha sido recomendado por varios medios internacionales.

¡Esto es una historia completamente real!

En la década de los 70's y 80's, Chikatilo hizo tambalear a la Unión Soviética, que se jactaba de ser un "paraíso" donde no había "aberraciones". Pero lo cierto es que Chikatilo mostraba todas las aberraciones posibles. Este hombre asesinó a más de medio centenar de personas a quienes torturaba para después comerse sus órganos sexuales. El placer que le provocaba matar era tal, que tenía orgasmos mientras lo hacía. Obsesionado con el sexo y la sangre, relató que, cuando sus víctimas todavía estaban vivas, él las sometía a diversas amputaciones (útero, testículos, ojos, pezones…). A veces usaba cuchillos pero a veces lo hacía con sus propios dientes.

"Yo soy un error de la Naturaleza, una bestia enfadada", dijo en algún momento este hombre, conocido como el carnicero de Rostov

La historia del monstruo

Chikatilo nació en Ucrania el 16 de octubre de 1936. En aquella época, en medio del hambruna que azotaba su pueblo, los cadáveres se acumulaban en las calles. En esa coyuntura, su hermano mayor, Stepan, fue raptado y devorado por pobladores, desesperados por el hambre. Eso marcó a Andrei para siempre…Screen Shot 2017-03-03 at 12.17.52 PM

De niño fue tímido, introvertido y prefería aislarse. Aunque fue una víctima del constante "bullying" de sus compañeros, él solo callaba. Eso germinó en un odio y resentimientos espantosos y lo convirtió en una persona solitaria, incapaz de establecer relaciones con los demás y mucho menos con mujeres.

Fue soldado del ejército durante su juventud y logró graduarse en Literatura Rusa, Ingeniería y estudios del Marxismo-Leninismo.

Obsesionado con el sexo, a sus 35 años practicaba el voyeurismo y la historia relata que sus objetivos favoritos eran los menores de doce años (hombres y mujeres).

Se desempeñaba como maestro en una escuela, donde terminó convirtiéndose en víctima de sus propios alumnos que se burlaban de él, igual que lo hicieron sus compañeros de clase años antes.

Era 1978 y él tenía ya 43 años cuando descubrió que la sangre le generaba placer sexual. Fue entonces cuando raptó a una niña de 9 años y la llevó a una cabaña alejada. Al desnudarla la rasguñó y cuando la sangre comentó a brotar, experimentó una erección. Le clavó entonces un cuchillo y la apuñaló gran cantidad de veces hasta lograr el orgasmo.

Dos días después de ocurrido el hecho, la policía lo interrogó pero lo dejaron libre… Tres años después asesinó de nuevo. Esta vez su víctima fue una joven de 17 años a quien convenció de tener relaciones sexuales. En medio del acto la estranguló y le arrancó la garganta con sus dientes, le cortó los senos y se comió los pezones.

Su tercera víctima fue otra mujer, a quien raptó en un pueblo para acuchillarla 40 veces y le arrancó los ojos. Esto se convirtió en su sello.

Screen Shot 2017-03-03 at 12.18.26 PMEse mismo año (1981), Chikatilo mató a otras tres personas, a todas les sacó los ojos. En 1984 asesinó a 15 personas más. Sus víctimas eran niños, niñas o mujeres jóvenes. A todos los convencía hasta llevarlos a zonas boscosas donde los violaba para después acuchillarlos sin piedad. A ellos les extirpaba los testículos y les cortaba el pene, a ellas les sacaba el útero, los ovarios y se comía parte de los genitales y pezones.

Fue arrestado el 20 de noviembre de 1990 y una semana después confesó todo: había matado a 53 personas. Afirmó que "No podía controlar mis actos. Desde la niñez me he sentido insuficiente como hombre y como persona. Lo que hice no fue por el placer sexual, sino porque me proporcionaba cierta paz de mente y de alma durante largos periodos".

Tras un largo juicio, Chikatilo fue condenado a la pena capital: morir de un tiro en la nuca. Su ejecución ocurrió el 16 de febrero de 1994.

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