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Reportaje Especial

Esta pareja de chilenos “amasó” un sabroso empredimiento

Por Jacqueline Otey | 8 de Jul. 2018 | 12:02 am

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Tamara Suárez y Demián Camus son chilenos.  Ellos son padres de Amalia, una bebé de cinco meses, y en medio de la adversidad decidieron hacer pan para salir adelante. Afortunadamente la levadura creció y la idea resultó y se convirtió en la panadería "Donde el chileno".

La primera en llegar al país fue Tamara, hace un año.  Ella vino a estudiar agronomía, por medio de un programa de intercambio. Llegó a la Universidad de Costa Rica (UCR) y a la mitad del semestre se dio cuenta que estaba embarazada. Fue así como en noviembre de ese año llegó su novio, Demián, a buscarla. "Pero cuando quisimos viajar a Chile, ya tenía 7 meses y medio de embarazo y la doctora y la aerolínea me lo prohibieron. Así fue como nos quedamos aquí", recuerda Tamara.

La joven -de 23 años- recuerda que mientras esperaban la llegada de su hija, su novio no tenía trabajo y la necesidad de generar ingresos se volvió urgente. "Él en Chile tenía una empresa de mensajería, pero aquí no estaba haciendo nada y la bebé estaba por nacer. Por eso en diciembre pasado comenzó a hacer pan típico chileno…

Al principio no le resultaba, sin embargo comenzó a practicar, practicar y practicar, hasta que un día le quedó con la textura y sabor adecuado", dice.

Fue así como Demián comenzó a vender el pan en San Pedro, "iba con su delantal, un gorro de cocinero y el canasto con los panes… y poco a poco la gente le empezó a comprar", menciona.

Recetas de YouTube

Demián dice que eligió hacer pan para generar ingresos porque alguna vez lo había intentado en Chile. "La idea era hacer un producto chileno… quería mostrarle a Costa Rica algo novedoso y que no se puede encontrar en cualquier parte".

El joven, de 28 años, que es guía de aventura de profesión e insiste en que este emprendimiento de panadería comenzó por necesidad, pero con el tiempo se transformó en un negocio. "Creo que la necesidad saca lo mejor de uno y afortunadamente hemos ido avanzando", dice.

El ahora panadero afirma que para hacer el pan buscó recetas chilenas en Youtube y en un principio pasaba todo el día mirando los videos. "Al inicio el pan no me quedaba tan blando, y algunas personas que conocían el producto me decían: ‘está duro, pero se acerca al sabor real'. Pese a que no estaba muy bien ellos me lo compraban.

Ese dinero que gané lo invertí en comprar más harina, levadura e ingredientes. Me demoré 2 semanas en lograr que el pan quedara en su punto", señala.

El emprendedor cuenta que después que crearon la página de Facebook de la panadería "Donde el chileno(Ver aquí), y en ese momento las ventas en la calle se terminaron. "Los clientes empezaron a llamar y empecé a trabajar por  pedido", dice.

Demián hoy asegura que si uno siembra, obtiene buenos frutos, "creo que con las ganas que uno le ponga todo sale a flote. En este caso, de vender en la calle poco a poco hemos ido creciendo (…) De hecho, queremos que todo sea gradual… seguir trabajando de forma artesanal, que no se ocupen muchas máquinas, solo el horno.

La idea es amasar a mano en la panadería y ojalá tener carritos en ciertos sectores donde se puedan ofrecer los productos, que ahora también incluyen empanadas, sopaipillas secas y pasadas, pastel de choclo, torta chilena, entre otros", señala.

Tamara comenta que dentro de los planes a futuro que tienen está abrir una panadería estilo "feria gourmet". "La idea podría concretarse a fines de diciembre en conjunto con emprendedores de otros países… y ahí estaremos representando a Chile con los productos que hacemos", dice con orgullo.

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