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Estudiante de medicina con espina bífida cuenta los retos que enfrenta diariamente

Sus padres se esforzaron para ayudarlo a cumplir su deseo

Por Ingrid Hidalgo | 24 de Nov. 2024 | 1:01 pm

Ian Lizano es un joven de 25 años que nació con espina bífida y sueña con convertirse en médico para curar a personas con la misma condición.

Este sueño surgió cuando era niño y lo expresó a sus padres. Ellos se propusieron en ayudarlo a cumplírselo.

"Desde que tenía aproximadamente 5 años empecé a decirles a mis papás que quería ser doctor para curar a niños con mi misma condición y darles una mejor calidad de vida a la que los doctores me han dado a mí", dijo el joven oriundo de Cartago a crhoy.com.

"Cuando uno va creciendo, se va haciendo consciente de la vida, ve todas las injusticias, necesidades y demás, cosas que se presentan en nuestro sistema de salud", indicó.

Por ello, Ian también se propuso otra meta: Buscar la manera de ayudar al asegurado en cuanto a los procedimientos médicos para que sean más ágiles sin necesidad de esperar años para recibir la atención.

Asimismo, él desea que sus colegas aprendan a ser más humanos a la hora de atender a los pacientes, especialmente a las personas con discapacidad.

El esfuerzo de sus padres

Ian no habría tenido la oportunidad de estudiar su carrera de ensueño sin el esfuerzo de sus padres, quienes desde que el joven era bebé buscaron formas para darle una mejor calidad de vida.

Su padre, Mauricio Lizano, comentó a crhoy.com que Ian es su "mundo".

Don Mauricio dijo que cuando les contó que quería estudiar medicina, él y su esposa Nancy se preocuparon por las barreras que podría tener por su condición y el tema económico.

No obstante, dejaron de lado sus temores y trabajaron duro para que Ian pudiera entrar a una buena universidad y hacer realidad su sueño.

"Mi mamá me lleva y me espera en el carro porque mientras se devuelve a Cartago, yo salgo de clase. Prefiere quedarse", contó el joven.

"Desde los 3 meses de edad, cuando empecé en una escuela de enseñanza especial, andan conmigo para arriba y abajo", agregó.

Él expresó que el apoyo de sus padres ha sido muy importante.

"Son los que me impulsan. Quiero darles una mejor vida a la que ellos me han dado", dijo.

Discriminación

Aunque el joven está feliz en su universidad con el aprendizaje y el apoyo que ha recibido de los profesores, el director de la carrera y sus compañeros, él no tuvo un buen inicio.

Cuando Ian empezó a buscar opciones de lugares donde estudiar medicina, él y su padre fueron a una universidad y recibieron un mal trato.

"Mi papá me llevó (a una universidad) por información y la persona de registro, que fue buena gente, me dijo que sí podía empezar a estudiar, pero un requisito era que debía tener una reunión con el director de vida estudiantil", comentó.

"Iba pasando el director de vida estudiantil y el muchacho de registro lo llamó. El señor me dijo: ‘No creo que pueda estudiar medicina porque no está adaptado. No es la universidad, sino el sistema de salud, más en la CCSS'", recordó Ian.

Su padre lo defendió, señalando iban a luchar juntos contra las barreras en el sistema de salud.

Aquel comentario del director de vida estudiantil entristeció a Ian, pero no lo detuvo.

"Yo soy feliz y agradecido con la vida y mis papás, que son los que han estado ahí siempre y me apoyan en esto. Yo ejerceré y me graduaré, pero el título es de ellos", dijo Ian.

El joven comentó que cuando se gradúe de la universidad, quiere invitar a su mamá a recibir el título junto con él.

"No hay que rendirse"

A lo largo de sus 25 años Ian aprendió que, para hacer realidad sus sueños, debía luchar por ellos.

"Aprendí a no rendirme, que algún día se cumplirán", dijo el joven.

Incluso, al vivir con tantas barreras cada día, lo impulsa a derribarlas en distintas maneras.

"Vivir con discapacidad es vivir con las aceras que no están aptas, comercios con gradas y no poder entrar a ellos. O, en el caso de supermercados o mall, no encontrar espacios reservados y muchos oficiales dicen que a ellos nada más los contratan para cuidar", dijo Ian.

El futuro médico invitó a las personas a que se esfuercen y luchen por sus sueños.

"Algún día el esfuerzo tendrá recompensa", expresó el joven.

Además, él mencionó que le gustaría que todos se unieran para hacer un mejor Costa Rica sin barreras para las personas con discapacidad.

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