FEUCR: Bajo el actual gobierno ya no es seguro para quienes pensamos distinto participar en eventos públicos conmemorativos

La Federación de Estudiantes de la Universidad de Costa Rica (FEUCR) compartió un comunicado de prensa en el que condena las agresiones físicas y verbales sufridas por estudiantes durante la conmemoración de la Anexión del Partido de Nicoya, en Guanacaste.
El hostigamiento ocurrió a manos de simpatizantes del gobierno de Rodrigo Chaves Robles, en un ambiente de hostilidad que, según la Federación, contó con la anuencia del mismo presidente de la República.
Lamentablemente, este tipo de respuesta por parte de personas simpatizantes, movidas por el decir y actuar del presidente, demuestra que bajo el actual gobierno ya no es seguro ni legítimo para quienes pensamos distinto participar en eventos públicos conmemorativos. Cuando los espacios que deberían unirnos como pueblo terminan siendo usados para excluir, violentar y censurar, se comprometen seriamente la democracia, la convivencia y la posibilidad de construir país desde la diferencia, detalló la FEUCR.
La agrupación estudiantil reiteró que la participación de sus integrantes en dicha actividad fue completamente pacífica y parte de una gira universitaria organizada para conmemorar la fecha histórica.
De acuerdo con la FEUCR, comenzaron a ser hostigados con gritos e insultos. Además, la violencia escaló rápidamente hasta que fueron empujados, rodeados y expulsados del sitio donde se realizaba el acto oficial.
En medio de estos hechos, el presidente de la República, en lugar de llamar al respeto o a la calma, se refirió públicamente a nuestros compañeros diciendo que: "solo eran cuatro gatos, no jaguares… déjenlos en paz, más bien ténganles lástima", expone el comunicado.
La Federación fue clara en que minimizar y ridiculizar a los estudiantes contribuyó a legitimar la agresión en su contra.
Asimismo, consideran que la llegada tardía de la Fuerza Pública evidencia el "retroceso institucional en materia de libertades democráticas y el riesgo que enfrentamos quienes ejercemos nuestro derecho a expresarnos y organizarnos".
Para la FEUCR, esta tarde el gobierno de Rodrigo Chaves Robles demostró que, en su mandato, "la democracia y la libertad de expresión no son una opción".
También consideran que el público que lo apoya demostró estar dispuesto a llegar hasta las últimas consecuencias.
El presidente de la República no es un presidente para todas y todos, siendo cómplice de la censura, donde, en vez de llamar a la calma o al respeto, que es lo mínimo que se esperaría de un mandatario, el público presente que apoya al oficialismo demostró estar dispuesto a llegar hasta las últimas consecuencias, incluso si eso implica violentar física y verbalmente a estudiantes de universidades públicas, ignorando por completo sus edades, si había menores de edad, la diferencia física o alguna condición», indicó la FEUCR.
Basta con portar ropa de la UCR
El movimiento estudiantil cuestionó si basta con portar ropa alusiva a la UCR para ganarse un insulto del presidente y la violencia colectiva de sus seguidores.
La FEUCR considera que "el odio hacia lo que representa la universidad pública ha escalado al punto de justificar la agresión como si fuera una reacción válida".
Hoy no hubo megáfonos, ni carteles, ni consignas, ni pancartas. Solo el logo de nuestra benemérita y la presencia pacífica de sus estudiantes. Entonces, ¿Cuál es el problema? ¿Tanto rechazo les genera la educación pública?, cuestiona el comunicado.
Desde la Federación aseguraron que no hay ni pena ni lástima en usar las camisas de la UCR. "No hay vergüenza en ser estudiante de una institución pública que defiende el pensamiento crítico y el acceso a la educación", comentaron.
El comunicado finaliza indicando que desde la FEUCR no se busca la confrontación. Además, reiteraron que su presencia fue respetuosa y pacífica.
Denunciamos estos actos como una forma de represión política y como parte de un patrón preocupante de violencia simbólica y física contra quienes piensan diferente. Estar presentes en una actividad pública conmemorativa no puede ni debe ser motivo de censura, agresión ni exclusión. Exigimos al Gobierno una disculpa pública, una investigación sobre lo sucedido y garantías para que hechos como este no se repitan, concluye el comunicado.
