Ganadero tico solicitado por la DEA era seguido por envíos de droga de $1,2 millones
Jonathan Guillermo Álvarez Alfaro, de 46 años, el tercer costarricense detenido con fines de extradición a Estados Unidos, tras una solicitud formulada por la Administración para el Control de Drogas (DEA, por sus siglas en inglés) es mencionado en la orden de arresto emitida por la Corte de Distrito Este de Texas como uno de los principales responsables de coordinar envíos de cocaína desde Costa Rica hacia territorio estadounidense desde al menos el 2014.
Según el expediente, su organización habría generado al menos $1,2 millones en ganancias ilícitas.
El sospechoso, dedicado también al comercio de ganado, es investigado por conspiración para fabricar y distribuir cocaína con conocimiento de que sería exportada ilegalmente a Estados Unidos. La orden de arresto fue girada el 12 de mayo del 2021.
Álvarez fue capturado la semana pasada por agentes del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) en el marco de la Operación Venus, en la cual también fue arrestado uno de sus hermanos, con quien comparte nexos empresariales.
La DEA lo ubica como uno de los tres cabecillas de una red transnacional de lavado de dinero, que utilizaba actividades legales como bienes raíces, subastas ganaderas, comercio de vehículos y operación de canchas deportivas para legitimar capitales provenientes del narcotráfico.
Además, el informe señala que forma parte de una organización criminal activa desde al menos el 2008, con operaciones en Colombia, Ecuador, Panamá, Costa Rica, Guatemala, Honduras, México y otros países, y con presuntos vínculos directos con el Clan del Golfo en Colombia y el Cártel de Sinaloa en México.
"La investigación identificó al Sr. ÁLVAREZ ALFARO como costarricense y miembro de la DTO (organización criminal). Desde aproximadamente el 2014 hasta al menos el 12 de mayo de 2021, el imputado fue responsable de dirigir, gestionar y facilitar algunas de las actividades de narcotráfico de la DTO en Costa Rica, Panamá y otros países.
Su función dentro de la DTO incluye recibir, almacenar, transportar y distribuir grandes cargamentos de cocaína en Costa Rica y otros países, así como coordinar el movimiento de cocaína hacia y a través de Nicaragua, El Salvador y Guatemala para su posterior distribución", dice la DEA.
Basado en declaraciones de testigos colaboradores y comunicaciones interceptadas a exintegrantes de una red narco, las autoridades estadounidenses lograron vincular a Jonathan Guillermo Álvarez Alfaro con un importante cargamento de droga decomisado en Costa Rica en 2016.
Según el expediente judicial de la DEA, el sospechoso —actualmente detenido con fines de extradición— habría participado en el traslado de 328 kilogramos de cocaína, incautados por la policía costarricense en San José el 21 de julio del 2016.
Durante una de las vigilancias realizadas por las autoridades, se observó a Álvarez conduciendo un vehículo Toyota Hilux, del cual se sospechaba estaba cargado con droga. Al ser interceptado y registrado, los agentes descubrieron 149 kilogramos de cocaína ocultos en el vehículo.
Tras su detención, se realizaron allanamientos en su residencia, donde se decomisaron otros 179 kilogramos de la misma sustancia y se procedió con la captura de varios presuntos cómplices vinculados con la estructura criminal.
Este caso es parte de las pruebas aportadas por el gobierno estadounidense en la solicitud de extradición en su contra, al que acusan de ser una figura clave dentro de una red transnacional dedicada al tráfico de drogas y lavado de activos.
"Un testigo colaborador (en adelante, CW-1 por sus siglas en inglés) informó a las autoridades policiales que la cocaína descrita, incautada por las autoridades costarricenses en julio de 2016, estaba destinada al Sr. ÁLVAREZ ALFARO. Un segundo testigo cooperante (en adelante, CW-2 por sus siglas en inglés) informó a las autoridades policiales que él conocía al Sr. ÁLVAREZ ALFARO desde aproximadamente el año 2016 y que había realizado transacciones de cocaína con el imputado. CW-2 informó que, aproximadamente en septiembre de 2016, el Sr. ÁLVAREZ ALFARO, tres asociados y él mismo, llevaron a cabo una operación de cocaína que involucraba entre 300 y 400 kilogramos de cocaína", menciona el documento.
El testigo 2 confesó ante las autoridades estadounidenses que Álvarez, junto a dos socios, coordinó la entrega de un cargamento de cocaína a un grupo criminal en Guatemala, por el cual recibieron un pago de $1.500.000, según consta en la documentación de la DEA.
A esa operación se suma otro envío realizado en 2017, revelado por el testigo 1, quien afirmó que Álvarez también participó, junto a los mismos asociados, en el transporte de 300 kilogramos de cocaína. Este traslado se habría ejecutado mediante un colaborador del grupo radicado en Guanacaste.
Álvarez fue detenido este martes por el Organismo de Investigación Judicial (OIJ), en el marco de la operación Venus. Con su arresto, se unió a la lista de costarricenses solicitados por la justicia estadounidense, junto con el exministro de Seguridad Celso Gamboa Sánchez y el exconvicto por narcotráfico Edwin López Vega, conocido como Pecho de Rata, capturados el lunes anterior por hechos relacionados.
Los tres enfrentan cargos por conspiración para el tráfico y distribución de cocaína hacia Estados Unidos, presentados por un tribunal del Distrito Este de Texas. Actualmente, cumplen dos meses de prisión preventiva mientras el Tribunal Penal de San José analiza las solicitudes de extradición.