Grupo desmantelado por lavado reclutaba policías desde el 2011
Hermanos Champions buscaban tener en sus filas a oficiales de diferentes instituciones.

Policías en allanamientos por lavado de dinero en Heredia
El grupo desarticulado este martes en Heredia y Alajuela por la Oficina Especializada de Crimen Organizado del OIJ, señalado por presunto lavado de dinero proveniente del robo de contenedores, tiene un historial reclutando policías.
La organización buscó en varias ocasiones a oficiales de distintos cuerpos de seguridad para sumarlos como aliados en casos vinculados a los hermanos Araya Castillo, conocidos como Los Champions.
En total, lograron incorporar a seis funcionarios públicos en diferentes etapas en los que participaron durante los últimos 14 años, migrando cada cierto tiempo a diferentes negocios.
La investigación del OIJ, que permitió desarticular a la agrupación, identificó al menos a tres policías vinculados: dos agentes judiciales y un oficial de Fuerza Pública. Ellos habrían filtrado información sobre operativos en curso y movimientos en carretera para alertar al clan.
El director del OIJ, Randall Zúñiga, explicó que ninguno de los tres fue detenido y solo uno figura como imputado. Los otros dos permanecen bajo investigación, motivo por el cual se ordenó decomisar sus teléfonos celulares.
De acuerdo con el expediente, los agentes judiciales ingresaron al sistema de consultas del Poder Judicial para verificar si algún miembro de la banda enfrentaba procesos abiertos, mientras que el oficial de Seguridad Pública alertaba sobre patrullajes en las zonas ligadas al robo de contenedores.
Antecedentes de policías reclutados
En 2011, el primer grupo ligado a Michael Ricardo Araya Castillo también había reclutado a un piloto del Servicio de Vigilancia Aérea (SVA), de apellidos Miranda Sánchez.
Según el OIJ, este funcionario solicitó vacaciones para viajar en un vuelo comercial junto a Michael Araya a Jamaica, en mayo de ese año. El objetivo era coordinar con un proveedor de marihuana tipo high red y gestionar el alquiler de una avioneta para el transporte de droga.
La policía judicial señaló que Miranda además asesoraba a la organización en rutas aéreas y apoyaba en la adquisición de aeronaves.
Sin embargo, el 19 de agosto de 2011 Michael Araya fue asesinado en su casa en Barva de Heredia. Tras su muerte, el liderazgo lo asumieron otros sujetos conocidos como Pato y Gato, quienes crearon una nueva célula llamada Los Amigos.
En aquel momento, una de las hipótesis policiales fue que los propios peones de Champion participaron en el plan para asesinarlo y quedarse con el control del grupo.
Otro reclutado en ese periodo fue un oficial de Fuerza Pública de apellido Brenes, investigado por filtrar información táctica que permitió a la organización evadir operativos. Además, un funcionario de Aduanas, también de apellido Brenes, colaboraba con la agrupación.