Juan Gabriel: una vida entre la tragedia y el éxito
El cantante mexicano tuvo una niñez muy complicada, pero su música lo sacó adelante
Escribir y hablar sobre Alberto Aguilera Valadez sería perder el tiempo, nadie sabe quién es. Pero hacerlo de Juan Gabriel es poner en perspectiva la vida de un ídolo de la música en México y en el resto de Latinoamérica.
La muerte del mexicano nos hace recordar una vida que fue trágica al inicio, pero que se fue transformando en un referente que lo llevó a lo más alto de la popularidad en muchos países.
Nacido el 7 de enero de 1950, el Divo de Juárez fue el menor de 10 hermanos, de los cuáles 5 ya fallecieron. Su padre, Gabriel Aguilera, que era campesino, murió cuando Juan Gabriel apenas tenía 3 meses de nacido, después de una serie de acontecimientos inusuales.
Tiempo después su madre, tras tener problemas con sus familiares, decidió marcharse hacia la ciudad de Chihuahua, donde Alberto, que todavía no era Juan Gabriel, creció.
Con escasos 5 años fue ingresado en un internado de mejoramiento social. 8 años estuvo recluído ahí, lejos de su madre y hermanos, por lo que le tocó madurar desde temprana edad. Ahí aprendió a trabajar y a desarrollar su sentido de la observación gracias a un hombre llamado Juan Contreras, a quien vio siempre como un padre, maestro y amigo.
Pero el principal legado que le dio Contreras fue enseñarle sobre música y a tocar guitarra, lo que le permitió a Alberto componer su primera canción titulada "La muerte del palomo".
Lo que le dio este hombre del internado fue tan grande en la vida del músico que una vez que se convirtió en artista adoptó el nombre de Juan Gabriel, en honor a él y también a su padre.
Cuando cumplió 13 años decidió escapar del internado. Se dedicó a vender en la calle artesanías de madera, mimbre y hojalata y al cumplir 14 años regresó con su mamá y su hermana para dedicarse a la venta de burritos (comida tradicional) en Ciudad Juárez.
Su deseo de ser músico estaba metido en sus huesos, por lo que empezó a viajar ya a buscar oportunidades, aunque sin éxito. Conoció mucha gente y tuvo oportunidades de hacer coros con varios reconocidos artistas, pero otro tropiezo en su vida truncaba ese sueño.
Acusado de robo, fue encarcelado durante 18 meses, hasta que se comprobó su inocencia. A partir de ahí, las oportunidades empezaron a llegar y en 1971 nace Juan Gabriel con su primera grabación.
Desde aquel momento el dinero, la fama y la música lo situaron en lo más alto en su país y en muchos otros de América. Claro, su fama hacía imposible que no hubiese polémicas, pero siempre supo sacarlas adelante.
Su sexualidad fue quizá el gran secreto nunca contado por el propio Juan Gabriel, quien hoy se marchó de este mundo dejando un gran legado en el mundo de la música.