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La Ley Jaguar es legalizar la corrupción

Por Agencia | 10 de Jun. 2024 | 4:36 am

La democracia ha demostrado ser el sistema por excelencia pero debe ser objeto de constante mejora, ya que nunca ningún sistema será perfecto. En busca de esa mejora, hoy la Administración Chaves Robles quiere eliminar las reglas del juego para beneficiar a quien literalmente se quiera.

La reforma propuesta mediante referéndum es muy clara, NO se va a buscar el mejor criterio para el beneficio de los costarricenses, ni el mejor precio, ni el mejor plazo de entrega. Simplemente al permitir las compras y alquileres a dedo, sin licitación pública ni transparencia, prevalecerá el beneficio personal del gobernante de turno y no el del país.

La intencionalidad de la reforma es evidente. Al eliminar por completo la licitación pública, se podrán pagar compras y alquileres con mayor precio y menor calidad, en detrimento de los costarricenses, pero la ley lo permitirá. Al exceptuarse los procedimientos de dichas compras y alquileres de los "procedimientos ordinarios".

La reforma propone explícitamente "La Administración podrá comprar y tomar en arrendamiento bienes inmuebles, sin emplear procedimientos ordinarios". Es tanto los millones que están en juego, que están desesperados por robarse el pastel.

Debe entenderse que los procedimientos ordinarios a los que hace referencia son las licitaciones públicas que buscan los criterios de precio y calidad. ¿Qué si hay corrupción con algunas licitaciones públicas? Claro, es evidente. Pero eso no significa que debamos eliminarlas para que el gobierno de turno las asigne a dedo, legalizando la corrupción.

La democracia se debe mejorar constantemente, no debilitarla. No se debe eliminar la Fuerza Pública, el OIJ y todas las fueras de seguridad de un Estado, solo porque hay crimen, narcotráfico y corrupción en ellas. Imaginen si se eliminaran. El nivel de caos del país sería inimaginable.

Básicamente el Gobierno de Rodrigo Chaves propone eliminar la transparencia y las licitaciones públicas, atacando seriamente la institucionalidad democrática de Costa Rica, e impulsando legalizar la corrupción.

Imaginen a un alcalde realizando compras y alquileres de su Municipalidad a dedo. Sería algo catastrófico. Sería legalizar la corrupción.

Y es que el norte del Gobierno se centró en los grandes negocios: venta del BCR, proyecto Ciudad-Gobierno, Marina y Terminal de Cruceros en Limón. Donde evidentemente habrá "cariñitos" de por medio como los del BCIE. Los políticos costarricenses ya hablan sin tapujos y a gritos dicen: "déjenme robar que todos han robado". Ya ni vergüenza les da proponer legalizar la corrupción, han perdido por completo la poca decencia que queda.

Los mismos que defendieron la contratación pública de una persona investigada por narcotráfico con las FARC en el caso Azteca, ahora van con todo para robar a manos llenas. No tuvo el coraje de decir el nombre de la persona que defendió públicamente y si esa persona intentó importar drogas con las FARC. Parece ser que no tiene tanto coraje, pero si lo tiene para agredir un día si y otro también a nuestras mujeres como el matón que es.

Este político refleja la podredumbre de la sociedad, sin valores ni respeto, y con ansias de robar a manos llenas.

La medida parece ser hecha para seguir comprándole a las empresas fantasmas de los narcotraficantes que gobiernan Costa Rica.

Tenemos que impulsar reformas a las leyes para establecer penas más fuertes contra los funcionarios públicos y las personas electas popularmente que colaboren con el narcotráfico, y que NO sean objeto de absolutamente ningún beneficio carcelario. Tampoco en casos de comprobada corrupción y otros delitos. Que una exdiputada y ex defensora de los habitantes tuviera una sentencia de más de 70 años, por economía procesal le quedó en 7 años y 2 meses, pero terminará con una pena de 5 años y no irá a prisión. ¿Por qué nadie busca acabar con eso? Necesitamos mano dura del Estado contra la corrupción y el narcotráfico, porque Costa Rica está como lo era la Colombia de los años 90´s, y está a las puertas de la misma situación que Colombia, México y recientemente Ecuador.

Costa Rica no merece ser un narco-Estado como lo es hoy en día.

Tenemos que recuperar al país de estos parásitos.

Bach. Administración de Aduanas & Comercio Exterior – UCR
M.Sc. Relaciones Internacionales & Diplomacia – UNA

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