Menores consumiendo alcohol, drogas y vapeo destapan crisis en las aulas
Dos incidentes recientes en Naranjo y Palmares muestran cómo menores de edad consumen alcohol, drogas y vapeo dentro de escuelas y colegios, evidenciando la vulnerabilidad de los adolescentes y la necesidad de reforzar protocolos de prevención y atención

Fines ilustrativos
En las últimas semanas, el Ministerio de Educación Pública (MEP) ha atendido dos casos graves en donde se reportan menores de edad consumiendo drogas dentro de centros educativos, lo que desenmascara aún más la crisis de la educación en nuestro país. Pero, ¿por qué ocurre esto?
Según explicó el médico de la Casa Jaguar del Instituto sobre Alcoholismo y Farmacodependencia (IAFA), José Valverde, todas las personas somos vulnerables a caer en el consumo de estupefacientes y no se restringe estrictamente por la edad.
"Casi siempre el consumo inicia a edades tempranas, entre los 12 y 14 años. Entonces, sí se observa el involucramiento de centros educativos, que podrían convertirse en un nicho de comercio para las personas que venden sustancias. Lamentablemente, ya existen varios centros donde asisten jóvenes que han consumido sustancias ilícitas y no solo hablamos de alcohol u otras drogas, también del vapeo. Por eso es muy frecuente la atención de chicos que llegan aquí al IAFA desde escuelas o colegios", mencionó Valverde.
Cabe recordar que en la Casa Jaguar del IAFA se atienden jóvenes desde los 12 años hasta los 17 años y 25 días.
Cerebros en desarrollo, más expuestos al consumo
El experto señala que el menor de edad es vulnerable porque su organismo y, principalmente su cerebro, aún se encuentra en proceso de desarrollo y que no es hasta los 25 o 30 años que se alcanza la madurez.
"La parte prefrontal —ubicada detrás de la frente— es la que nos ayuda a la toma de decisiones, resolución de conflictos, discernimiento, respeto de límites y horarios. Todo eso nos permite detenernos y reflexionar: '¿puedo hacerlo?, ¿no puedo hacerlo?, ¿es bueno para mí?, ¿no es bueno para mí?'.
Mientras que el adolescente actúa más por impulsos: 'quiero hacerlo, quiero ver qué pasa, me gusta'.
"Las sustancias psicoactivas generan placer y sensación de bienestar, lo que refuerza el consumo. ¿Qué afecta entonces el consumo en un menor en desarrollo? La parte prefrontal, la concentración, el aprendizaje, la memoria y el comportamiento social: el respeto de límites, de figuras de autoridad como padres, profesores o policías. Todo eso se ve alterado", menciona el experto.
Valverde explica también que "mientras más temprano inicia el consumo, mayores serán las consecuencias en el desarrollo cerebral", pero que en caso de que el consumo se interrumpa en edades tempranas, la recuperación será más efectiva.

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Menores intoxicados en escuela de Naranjo
El pasado 27 de agosto, en horas de la mañana en la escuela Judas Tadeo Corrales, en Naranjo, una estudiante de 10 años llevó a la institución una bebida gaseosa en la que, según las investigaciones preliminares, habría disuelto alcohol al 90 % tomado de su casa.
La mezcla fue compartida entre algunas compañeras, quienes poco después presentaron síntomas de intoxicación.
Según confirmó el director de la DRE de Occidente, Miguel Sibaja, la docente a cargo activó los protocolos correspondientes y solicitó apoyo al 9-1-1 y a la Cruz Roja. Dos menores fueron trasladadas en condición grave al Hospital de Grecia.

Escuela Judas Tadeo Corrales en Naranjo
Sibaja añadió que, durante el incidente, la estudiante que llevó la bebida habría agredido a la docente, por lo que esta fue enviada al Instituto Nacional de Seguros (INS) para su valoración. La menor fue trasladada a la sede del Patronato Nacional de la Infancia (PANI) en Naranjo para seguimiento del caso.
William Cambronero, jefe del Organismo Regional Occidente–San Ramón del Instituto sobre Alcoholismo y Farmacodependencia (IAFA), indicó a CR Hoy que el programa que ejecuta el IAFA como método de prevención del consumo de sustancias adictivas en menores de edad se llama Dynamo, y que actualmente tiene cobertura en el 100 % de los colegios de Occidente.
Colegial inhalando aparente droga en Palmares
Mientras que, días después, se difundió un video en redes sociales en el que se muestra a un estudiante del Liceo Experimental Bilingüe de Palmares aparentemente inhalando algún tipo de sustancia ilícita dentro de la institución.
En la grabación —que este medio no publicará por respeto a la integridad del menor involucrado— se observa a varios estudiantes participando en lo que parecería ser un reto.
"Dele, dele", se escucha decir a uno de los estudiantes, mientras que otro responde: "¿Va a competir? Me mando la segunda y gano".
Miguel Sibaja, director regional de Educación de Occidente, confirmó a CR Hoy que el menor se mantiene como estudiante activo dentro de la institución y explicó que el video habría sido grabado meses atrás.
"En cuanto al video que circula, donde un estudiante consume por la nariz una sustancia, de acuerdo con la información enviada por la supervisión del circuito, se pudo determinar que dicho joven se encuentra matriculado en el centro educativo, por lo que se activó el protocolo correspondiente", mencionó Sibaja.

Colegio Experimental Bilingüe de Palmares
El funcionario del MEP agregó que se citó a los padres del menor, quienes fueron atendidos por las autoridades académicas.
El caso fue remitido también a la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) y al Patronato Nacional de la Infancia (PANI) para las acciones correspondientes. Mientras tanto, el centro educativo definirá, de acuerdo con el reglamento de evaluación de los aprendizajes, cuál procedimiento aplicar conforme a los protocolos de actuación.
¿Droga o Limoncho?
Por su parte, William Cambronero, jefe del Organismo Regional Occidente–San Ramón del IAFA, confirmó que, de momento, no es posible determinar si la sustancia que el menor estaba inhalando corresponde a un psicoactivo o a algún otro producto, ya que una de las hipótesis que se maneja es que se tratara de Limoncho.
"Él hace el gesto como de que estuviese inhalando droga, pero ese polvo puede ser Limoncho, que no es una sustancia psicoactiva. Es nociva para la salud de él, obviamente, pero no es una sustancia psicoactiva", explicó Cambronero.
Sin embargo, para Cambronero lo alarmante es la escena del menor, en la que simula estar consumiendo droga. Aclaró que no darán más declaraciones hasta conversar con el menor y con sus padres para determinar qué fue lo que ocurrió exactamente.

Operativo de decomiso de droga en aulas. Fines ilustrativos
Padres deben actuar con calma
El protocolo de actuación en situaciones de hallazgo, tenencia, consumo y tráfico de drogas del Ministerio de Educación Pública (MEP) detalla que algunas de las consecuencias del consumo de drogas son: cambios en el carácter, en el grupo de amigos, en los lugares que frecuenta, alejamiento afectivo o indiferencia, pérdida de lazo social, desinterés por actividades habituales, ausentismo, cambios en el rendimiento académico, agresividad y alteraciones en la concentración, entre otras.
José Valverde, médico del IAFA, también mencionó que en caso de abordar a un menor que consume drogas se debe hacer "con calma, cariño y amor, sin juzgar".
"Es un error decir: 'estás fumando, sos un drogadicto, un marihuanero'. Lo correcto es buscar el motivo: 'Me comentaron en el colegio que hay sospechas de consumo, ¿me podés contar si es cierto?, ¿tenés algún problema?, ¿cómo te puedo ayudar?'. Antes de confrontarlos, los padres deberíamos informarnos sobre consumo de drogas. No se trata de alcahuetería ni de una moda pasajera; muchas veces es un escape. La mayoría de muchachos que atendemos aquí cuentan que tenían problemas en casa, estrés escolar, que habían terminado con su pareja, o que buscaban pertenecer a un grupo. Alguien les ofreció, probaron y les gustó", mencionó Valverde.