Hallan los restos de niña que desapareció en una boda en Francia
(AFP)- Maelys de Araujo, de 9 años desapareció en agosto anterior cuando asistía con sus padres Joachim y Jennifer de Araujo a una boda. La pequeña vestía de blanco ese día y había asistido al evento con ilusión, según narraron sus padres a los medios, mientras pedían ayuda para dar con el paradero de su niña. Durante mucho tiempo mantuvieron la esperanza de hallarla con vida. Hoy confirmaron lo que tanto temían: las autoridades encontraron los restos del cuerpo de su hija, siguiendo las indicaciones de Nordahl Lelandais, un exmilitar que confesó haberla matado "involuntariamente", según anunció el fiscal de Grenoble, Jean-Yves Coquillat.
Lelandais también había estado invitado a aquella boda que terminó en tragedia para Maelys y su familia. El sujeto, detenido desde setiembre como sospechoso de la desaparición de la menor, la sacó del sitio de la fiesta y -por razones que todavía se desconocen- la mató.
Poco a poco los reportes de la policía fueron confirmando la culpabilidad de Lelandais, hasta que hoy él mismo confesó los hechos sin dar detalles de lo ocurrido pero especificando el barranco donde había lanzado los restos del cuerpo de la pequeña, a menos de diez kilómetros del sitio de aquella boda donde tanto había disfrutado la niña. Los investigadores necesitaron casi todo el día para dar con el cuerpo por las malas condiciones del lugar y la abundante nieve. "Los gendarmes y los perros permitieron descubrir el cráneo y un hueso", precisó Coquillat.
Las sospechas
Pese a que Lelandais estaba detenido desde setiembre, el sujeto guardó silencio hasta ayer, cuando decidió ampliar su declaración, admitir el asesinato "por accidente" de la niña y confesar el sitio donde ocultó el cuerpo. Sin embargo, una serie de pruebas y pistas habían permitido mantenerlo bajo arresto hasta ahora.
Cámaras de seguridad captaron al sujeto abandonando el sitio de la boda minutos antes de que se reportara la desaparición de la niña. "Una figurita delgada y vestida de blanco se aprecia en el asiento del copiloto", indicaron en aquel entonces las autoridades. Esa era Maelys. Nadie sabe por qué la niña se marchó con él, qué ardid usó él para convencerla ni qué sucedió después. Era la madrugada del 27 de agosto.
El sospechoso es además investigado por otros crímenes.
En un momento de ese día, Lelandais puso su celular en modo avión. Así permaneció durante 39 minutos, tiempo durante el que las autoridades creen el sujeto mató a la niña. Sospechan que recurrió al modo avión para evitar que su móvil fuera rastreado y se desconoce qué hizo con el cuerpo.
Lo siguiente que se supo de él fue gracias a otras imágenes de cámaras de seguridad de una estación de gasolina, que muestran a Lelandais limpiando el carro Audi A3 que conducía. Lo lavó durante más de dos horas con un detergente tan fuerte que dos perros policía usados para rastrear restos humanos cayeron enfermos después revisar el vehículo. Aun así, muestras de ADN de la niña aparecieron en el panel delantero del carro del exmilitar. Eso permitió su detención.
Sin embargo, una orden reciente de las autoridades para desarmar el carro y examinarlo permitió, hace poco, dar con rastros de la sangre de Maelys… Eso obligó al sujeto a confesar.
"Esta noche, los padres de Maelys saben que su hija está muerta, que fue asesinada", dijo el fiscal a la prensa.
La justicia investiga además a Lelandais por su presunta implicación en otros casos de desapariciones que nunca fueron esclarecidos.
