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40 testigos declararon ante tribunal en juicio por crimen de María Luisa Cedeño

Familiares y amigos de víctima, empleados de hotel así como peritos de OIJ rindieron testimonio

Por Paulo Villalobos | 17 de Feb. 2023 | 1:03 pm

(CRHoy.com) Cuarenta personas desfilaron durante los últimos cinco meses por el estrado de la sala de juicios cuatro de los tribunales de Goicoechea, para referirse a los hechos que les constan o las diligencias que efectuaron, en relación con el asesinato de María Luisa Cedeño.

Los deponentes incluyen desde una mucama y un encargado de mantenimiento, hasta científicos del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) e independientes, según una lista reconstruida por CRHoy.com, a partir de publicaciones, apuntes de la cobertura del debate y consultas a las partes.

El primero en declarar ante el Tribunal Penal de Quepos fue el oficial especialista en escena del suceso de la Policía Judicial, Ronny León. Lo hizo en varias audiencias; la primera de ellas el 14 de setiembre de 2022.

Su testimonio llegó al día siguiente del inicio formal del contradictorio -tras una semana de suspensión por un quebranto de salud del imputado Harry Bodaan- y abordó en términos generales lo encontrado el 20 de julio de 2020 en la habitación tres del hotel La Mansión Inn, en playa Manuel Antonio, en Quepos.

Por ejemplo, se refirió a la manipulación del cuarto y apuntó que podía responder a la simulación de un asalto. Incluso, llegó a manifestar que -producto de una interpretación- era posible perfilar que los perpetradores del hecho sienten odio hacia las mujeres.

También dio algunas pinceladas sobre las heridas halladas en el cuerpo de la víctima, pero fue la patóloga Silvia Fernández quien profundizó en el tema, al referirse a la autopsia que practicó a la anestesióloga de 43 años de edad. Dicho examen determinó que la ofendida murió producto de un desacomodo de sus vértebras cervicales. De igual manera, identificó graves lesiones en la vagina y el ano, además de golpes considerables en diferentes partes del cuerpo.

El cadáver tenía tres heridas que consumieron gran parte de los interrogatorios y las sesiones. Se trata de posibles mordidas no consensuadas en el antebrazo derecho, la mejilla derecha y el seno izquierdo.

Pero, ¿qué tienen de especiales esas lesiones? Para el odontólogo forense del Organismo de Investigación, José Manuel Fernández, esas heridas pudieron ser provocadas por Bodaan y el coencartado Luis Carlos Miranda, toda vez que un análisis por él realizado concluyó que no era posible excluirlos como potenciales mordedores. Eso sí, mientras era cuestionado, el especialista dejó en claro que las pruebas que practicó sirven únicamente para descartar mordedores, no para identificarlos.

Con ese contexto, se tiene que el experto alcanzó a excluir a cinco de las siete personas que estuvieron en el alojamiento turístico la madrugada en la que Cedeño fue asesinada: el acusado Teodoro Herrera, el guarda Cristhofer Castro y el copropietario del hotel Yáder Danilo Obando, así como las huéspedes Karla Retana y Ariel Rojas.

Los resultados de las pericias efectuadas por Fernández fueron cuestionados por la médica forense Aurora Valenzuela, decana de la Facultad de Medicina de la Universidad de Granada, España. La especialista extranjera -a la que la familia de Miranda contrató por unos ¢5,6 millones– apuntó que las heridas del antebrazo y el seno eran inconclusas, coincidiendo en que la de la mejilla sí fue provocada por huellas dentales.

Señalamientos de la parte acusadora sobre los atestados de la especialista y, principalmente, la apertura de una causa por presunto ejercicio ilegal de la profesión, ponen en entredicho la credibilidad que le vaya a dar el órgano jurisdiccional a la perita. La pesquisa contra Valenzuela se sustenta en la ausencia de acreditaciones en los colegios de Médicos y Cirujanos, así como de Cirujanos Dentistas.

El inicio del expediente y su anuncio en el juicio antes del segundo día de declaración de la experta provocaron choques entre las partes. La defensa calificó la actuación del Ministerio Público de amedrentamiento; situación que hasta el fiscal general Carlo Díaz salió a rechazar con contundencia.

¿Y que pasa con Herrera? Las evidencias en su caso parecieran ser más certeras. La Policía Judicial encontró su semen en la vagina, el ano y la boca de la víctima, al tiempo que ubicó heridas de posible defensa en su rostro y espalda. Su huella plantar fue vista en un charco de sangre.

Asimismo, canes entrenados en la detección de fluidos humanos marcaron positivo por sangre en el cuarto y baño del bailarín, en sus zapatos, en un short, en su celular y en su reloj. Esos reportes fueron luego sometidos con la técnica Kastle-Meyer (aplicación de fenolftaleína sobre un rastro que se toma con un aplicador, que se oxida en el ambiente y se torna fucsia) así como a la aplicación de la sustancia denominada como luminol, que reacciona con algunos componentes de la hemoglobina y provoca quimioluminiscencia (brillo azulado en escenarios oscuros).

Perros también encontraron rastros de sangre en el carro de Miranda, pero al efectuarse otras pruebas, estas dieron negativo, como lo comentó la bióloga forense de la Unidad Canina del Organismo de Investigación, Tatiana López.

Del total de testigos, 18 correspondían a peritos de distintas áreas, tales como Medicina Legal, Odontología Forense, Bioloquímica, Archivo Criminal, Imagen y Sonido Forense, Informática y Telecomunicaciones, entre otras.

Otros 5 empleados de La Mansión Inn, así como 10 allegados -entre padres, hermanos, amigos y exnovios- también rindieron testimonio en el debate.

A ellos deben sumarse las otras 2 huéspedes que estuvieron en el hotel, 2 funcionarios públicos, el representante de una empresa que instaló el sistema de llaves electrónicas en el alojamiento, una mujer con la que María Luisa Cedeño coincidió en playa Biesanz y el médico que operó a Harry Bodaan.

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