Chaves se atribuyó gestión para viaducto en ruta 27 que venía desde 2021
Desde 2021, entonces jerarca de Consejo Nacional de Concesiones se refirió a esta obra

Chaves aseguró que el puente modular en el cruce del aeropuerto Juan Santamaría es una "belleza". Casa Presidencial
El viernes 8 de diciembre, durante la inauguración del puente bailey colocado sobre la autopista San Ramón-San José, en las cercanías del Aeropuerto Internacional Juan Santamaría (AIJS), Rodrigo Chaves, presidente de la República, hizo un repaso por algunas acciones referentes a infraestructura vial durante la actual Administración (2022-2026).
Entre esas, el mandatario apuntó que "el gobierno hizo que el concesionario (Globalvía) de la ruta 27 (San José-Caldera) solucionara el problema del hundimiento (en el kilómetro 44 de la carretera) con la colocación de un puente metálico".
Lo cierto es que la colocación de esa estructura se acordó desde mediados de 2021 durante la Administración Alvarado Quesada (2018-2022).
Incluso, fue José Manuel Sáenz Scaglietti, secretario técnico del Consejo Nacional de Concesiones (CNC) entre 2018 y 2022, quien desde julio de 2021 indicó que se había acordado con la empresa Globalvía el impulso a esta alternativa para solucionar el problema del hundimiento.
El puente metálico en el kilómetro 44 fue construido y colocado por cuenta del concesionario de la autopista. La inversión, cercana a los $15 millones, fue asumida por la empresa como parte de lo dispuesto en el contrato de concesión.
La estructura entró en operación el 30 de octubre pasado, con un acto en el que Chaves figuró entre las primeras filas. También, estuvo Luis Amador, ministro de Obras Públicas y Transportes, y representantes del CNC.
Sobre este puente metálico construido por Globalvía, el mandatario alardeó diciendo que "resulta y sucede, es el más grande de todo Centroamérica".
En esa misma intervención, Chaves acotó que "esa obra esperó 13 o 14 años". Sin embargo, en realidad el hundimiento se detectó en 2011 (hace 12 años) y en años posteriores se hicieron intervenciones para atender la problemática, pero con el tiempo se detectó que eran insuficientes. Por eso, en 2021, se acordó la construcción del puente metálico por cuenta de la concesionaria.
En el acto del 8 de diciembre, Chaves hizo otra aseveración y dijo que "ya tenían hecha realidad la habilitación de los primeros 4 kilómetros de Circunvalación Norte". Pero, ese tramo, entre La Uruca y Tibás, estaba casi listo al 100% desde antes que asumiera como presidente de la República.
De hecho, la pasada Administración (Alvarado Quesada, 2018-2022) previó antes de salir que ese primer tramo se podría habilitar en agosto de 2022. Sin embargo, el gobierno de Chaves abrió esta parte de la obra en junio de 2023, alegando una serie de pendientes que se debían cumplir.
En el caso de la última fase de Circunvalación Norte, entre Tibás y Calle Blancos, la intención es habilitar el tramo en setiembre de 2024 para, por fin, completar todo el proyecto tras más de 40 años de espera.
La construcción de Circunvalación Norte arrancó en setiembre de 2017, durante la Administración Solís Rivera (2014-2018).
Las obras para la construcción del viaducto iniciaron en setiembre de 2022, cuando el gobierno apenas superaba los 4 meses y cuando precisamente Casa Presidencial estaba enfocada en encontrar una ruta para romper el contrato con Globalvía.

Viaducto en fase de construcción en el kilómetro 44 de la ruta 27. Imagen de setiembre de 2023. Cortesía: Globalvía
¿Por qué se hundía el kilómetro 44 de la ruta 27?
El deslizamiento en este kilómetro fue descubierto en 2011 por el Laboratorio Nacional de Materiales y Modelos Estructurales (Lanamme) de la Universidad de Costa Rica (UCR), un año después de la puesta en funcionamiento de la carretera, y es objeto constante de análisis en los informes anuales sobre el estado de la vía.
En la última década, la anomalía ha afectado el terraplén y las laderas aledañas de la carretera. Producto de este evento se generaron deformaciones de la carpeta asfáltica y el guardavía, grietas y asentamientos de magnitud variable en al menos 400 metros de la ruta.
Entre 2019 y 2020 se registró un incremento en el deterioro de la anomalía a causa de los impactos de la estación lluviosa de esos años. Lanamme, a través de su informe INF–PI–UGERVN–12–2020, preparado en setiembre y publicado en noviembre de 2020, explicó que el concesionario construyó un muro anclado y una pantalla de pilotes al pie del terraplén con el objetivo de estabilizar el terreno que da soporte al pavimento. Pero, el objetivo no se cumplió.
"Las grietas que cada cierto tiempo se observan en el pavimento de la ruta nacional en este sector, así como las que se han observado en la fachada de concreto del muro anclado y en la viga de coronación de la pantalla de pilotes al costado del relleno, confirman que el relleno continúa presentando condiciones de inestabilidad", apuntó el laboratorio.
En la superficie del pavimento y en la fachada del muro anclado se continúan presentando agrietamientos y hundimientos que, junto con los desplazamientos, confirman que se ha presentado movimiento en el terreno en este sector de la carretera.
El laboratorio detectó que el hundimiento se desplazó verticalmente unos 3 metros. Ese es uno de los principales señalamientos contenidos en el informe de evaluación anual 2022, elaborado en diciembre de ese año.