Costa Rica invierte 68% menos en salud que el promedio de la OCDE

El análisis Health at a Glance 2025 de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) revela que Costa Rica invierte un 68% menos en salud que el promedio.
El país destina 1.935 dólares per cápita a este rubro, frente a los 5.967 dólares del promedio de la OCDE. Esa inversión representa apenas el 6,8% del PIB, por debajo del 9,3% que destinan, en promedio, las naciones miembro.
Lamentablemente, el informe señala que Costa Rica no cuenta con datos comparables sobre la proporción del gasto en prevención dentro del gasto corriente en salud.
Otra problemática señalada por la OCDE es que Costa Rica tiene 1,1 camas hospitalarias por cada 1.000 habitantes, mientras que el promedio se sitúa en 4,2. De hecho, comparte los últimos lugares con México y Suecia.
Además, por cada millón de costarricenses hay 7 tomógrafos computarizados, equipos de resonancia magnética y escáneres. La cifra es preocupante, ya que el estándar de la OCDE es 51.

Cobertura en servicios de salud
Acceso a la salud
En Costa Rica, el 93% de la población está cubierta por servicios básicos de salud, es decir, consultas con doctores, exámenes, diagnósticos y atención hospitalaria. Durante 2024, solamente cuatro países de la OCDE registraron coberturas como la de Costa Rica, es decir, menores al 95%.
El análisis detalla que las personas que no están cubiertas son, normalmente, adultos en edades laborales con niveles de educación o ingresos bajos. Cabe resaltar que el 70% de los costarricenses están satisfechos con la disponibilidad de atención médica de calidad, lo cual coloca al país por encima del promedio de la OCDE, que es del 64%.
Por ejemplo, en Suiza el 89% de los ciudadanos están satisfechos. Por el contrario, en Grecia, Turquía, Hungría, Italia, Chile y Colombia el porcentaje de satisfacción es menor al 50%.
La OCDE resalta a Costa Rica como uno de los países con menor cantidad de consultas médicas presenciales por persona, con menos de tres, situación que se repite en México, Suecia y Grecia. Como punto de contraste, el promedio es de 6,5 consultas anuales. En el caso de Corea, la zona con la mayor cantidad, cada persona tiene aproximadamente 18 consultas médicas al año.
Con el pasar de los años, las consultas presenciales han disminuido en la región, posiblemente por el uso de teleconsultas.
Costa Rica tuvo menos de 100 altas hospitalarias por atención aguda por cada 1.000 habitantes, lo que coloca al país entre las tasas más bajas, junto a México, Canadá, Países Bajos, Chile e Italia. Los países con tasas que superan las 200 altas son Alemania y Austria.
Según el informe, el número de pacientes que salen de un hospital después de permanecer al menos una noche es un indicador fundamental de la actividad hospitalaria. Mejorar el alta oportuna de los pacientes puede ayudar al flujo dentro del hospital, liberando camas y tiempo del personal de salud.
Tanto las altas prematuras como las retrasadas empeoran los resultados en salud e incrementan los costos: las altas prematuras pueden generar readmisiones costosas; las altas retrasadas consumen recursos hospitalarios limitados.
En materia de prevención y atención oportuna, Costa Rica muestra contrastes significativos frente al promedio de los países de la OCDE.
Mientras el país destaca por una de las coberturas de vacunación más altas (el 99% de los niños elegibles recibió la vacuna contra la difteria, el tétanos y la tosferina, superando ampliamente el estándar internacional), enfrenta rezagos en la detección temprana del cáncer de mama: solo el 22% de las mujeres accedió a tamizajes, muy por debajo del promedio del 55% en la OCDE.
No obstante, el sistema de salud presenta un buen desempeño en la reducción de complicaciones prevenibles, con 161 hospitalizaciones evitables por cada 100.000 habitantes, cifra claramente inferior al promedio de 473 reportado por los países.
¿Qué es el informe?
Health at a Glance compara indicadores clave sobre la salud de la población y el desempeño de los sistemas de salud entre los países miembros de la OCDE, socios clave y países candidatos a la adhesión.
El análisis se basa en las estadísticas nacionales oficiales más recientes y comparables, así como en otras fuentes.
La edición de presente año muestra las diferencias entre países y a lo largo del tiempo en cuanto al estado de salud, los determinantes no médicos y factores de riesgo, el acceso y la calidad de la atención, el gasto en salud y los recursos de los sistemas de salud.