Crédito aprobado hace 8 años es el “salvavidas” de la carretera a San Carlos

El Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT) destinará $200 millones de un crédito con el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) aprobado en 2010 para procurar concluir la ruta a San Carlos.

El plan forma parte de la propuesta anunciada por el Poder Ejecutivo para reactivar la economía mediante el desarrollo de obras de infraestructura.

Dicho empréstito, denominado como "préstamo sombrilla", contempla un total de $350 millones que no habían sido asignados a obras.

Además de la carretera a San Carlos, el MOPT destinará $50 millones a cada una de estas obras: San José-San Ramón, Limón-Río Frío y cruce de La Lima de Cartago.

Rodolfo Méndez Mata, ministro del MOPT, aseguró que “sorprendentemente y por suerte” para los intereses de la cartera esos recursos no se han asignado. De paso, alegó que la ruta “no ha sido abandonada”.

La línea de crédito que ofreció el BID en 2010 era cercana a los $850 millones para múltiples obras. Sin embargo, la Asamblea Legislativa debía aprobar cada desembolso por partes y según cada proyecto.

Precisamente, en los últimos años el país fue cuestionado por la lentitud para ejecutar el dinero.

En el caso de la ruta a San Carlos, el MOPT ha estimado que se necesitan $300 millones para concluir la obra en el tramo central (Sifón de San Ramón-La Abundancia de Ciudad Quesada) y la punta sur (Sifón-San Miguel de Naranjo-Autopista Bernardo Soto). Los restantes $100 millones requeridos deberán ser puestos por el gobierno.

El tramo central de 30 kilómetros, cuyas obras comenzaron hace más de una década, enfrenta múltiples pendientes y el MOPT decidió poner punto final al contrato que mantuvo con la empresa Sánchez Carvajal desde hace casi 9 años.

Ahora, la propuesta es dividir los trabajos pendientes en 3 o más adjudicaciones distintas. Para Méndez, es claro que el proyecto es complejo y considera que se tardó en tomar acciones firmes.

“No podemos decir que se trate de un proyecto fácil. Como sabemos, tuvo en ejecución un contrato a lo largo de 15 años… Un proyecto sumamente complicado y sumamente complejo, al cual la Contraloría General de la República (CGR) le hizo llamados de atención muy fuertes, que el ministerio comparte y a raíz de eso dejó expirar el contrato con la empresa que ha sido operadora a lo largo de esos años”, citó el jerarca.

Bajo su óptica, “el proyecto se está ordenando, se está tecnificando y se está procediendo a cómo se debió haber procedido hace muchos año”.

Añadió que es una obra técnicamente “muy compleja”. “Se requieren por lo menos $300 millones para la terminación de las obras. No es un tramo central, sino la conexión de Ciudad Quesada con la Bernardo Soto a la altura de Naranjo”, citó el jerarca.

Múltiples pendientes

En el tramo central se requieren soluciones para el puente sobre el río Laguna (se requerirá una estructura nueva, posiblemente atirantada, con demolición de la fallida estructura) y solucionar hundimiento por anomalías en el terreno del kilómetro 21 (con un viaducto).

Sobre el río Laguna se tendrá que diseñar y construir un nuevo puente, tras reconfirmar con estudios que el terreno soportará una estructura más larga que la que se pretendió hacer. Los bastiones del puente ‘viejo’ tendrán que ser demolidos.

Otro punto es el hundimiento, pues se hizo un estudio para buscar una solución que –finalmente- arrojó una opción inviable económicamente. Lo que se requiere es un viaducto con un cambio al trazado original.

La ruta está compuesta por 44.6 kilómetros contemplada en 3 trayectos independientes: punta Norte (Florencia-Ciudad Quesada), tramo central (Ciudad Quesada-Sifón de San Ramón) y punta Sur (Sifón-San Miguel de Naranjo).