El duro reproche de los jueces a agresor: “Kimberly nunca volvió a ser la misma”
(CRHoy.com) "Ella, quien fue descrita como una persona atlética, siempre cuidadosa de quienes dependían de ella, de su hija menor de edad. Ya no puede ser independiente, requiere asistencia de alguien para siempre para todas sus actividades cotidianas. Ella ha indicado, y así lo han confirmado otra serie de probanzas, donde logra ver a su hijo y no la reconoce. Eso es algo con lo que tendrá que vivir siempre. Con la posibilidad de siquiera reconocer a sus familiares".
De esa manera, el Tribunal Penal de Heredia recriminó el lunes a Jean Carlo Ruiz Juárez las repercusiones de sus acciones en la vida de la oficial de la Fuerza Pública, Kimberly Suárez Narváez.
"Kimberly nunca volvió a ser la de antes", aseveró el juez Norberto Garay Boza, luego de leer el por tanto de la resolución que encontró culpable al empacador de 28 años de edad, de un homicidio calificado en grado de tentativa en perjuicio de la policía.
En sentido opuesto, el decisor destacó la actitud mostrada por la uniformada en todo momento, dado que en todo momento se mostró preocupada por una expareja de Ruiz Juárez, de apellidos Montoya Espinoza, a quien atendían como víctima del comportamiento violento del imputado, en su casa en barrio Siglo XXI en Llorente de Flores.
"Su preocupación por esta mujer no es sino una muestra del compromiso que deben tener los cuerpos policiales", destacó el juzgador.
Garay Boza además señaló a Ruiz Juárez por utilizar una Beretta F92 nueve milímetros, arrebatada a un compañero de Suárez Narváez durante un forcejeo que este mantuvo con el encartado, cuando intentaba detenerlo por incumplimiento de medidas de protección y desacato a una orden previa. Al respecto, el juez afirmó:
Un arma destinada a la protección ciudadana fue finalmente usada por usted para el sentido totalmente opuesto al destino de esa arma de fuego: amenazar a esos oficiales.
El decisor además enfatizó en que el agresor faltó a la verdad al declarar en el debate que el disparo con el que hirió a la agente de la Fuerza Pública fue accidental, toda vez que de las evidencias recabadas y los testimonios recogidos se tiene que él en todo momento amenazó a los policías con matarlos.
Ruiz Juárez dijo el 8 de abril pasado que él no le arrebató el arma al uniformado sino que a este se le cayó y que él no disparó a Suárez Narváez, sino que la pistola se accionó cuando intentaba descargarla, expulsando una bala que rebotó en el suelo, salió por un hueco en la puerta principal y dio en la cabeza de la policía.
"Violencia machista"
Otro elemento en el que ahondó el juez Norberto Garay Boza durante el reproche fue la relación de Jean Carlo Ruiz Juárez y Montoya Espinoza.
Se logró evidenciar que la socialización que usted desarrolló con ella se vio especialmente marcada por un contexto de violencia, un contexto de violencia machista, caracterizado por conductas celotípicas… celos de su parte, intentando controlar a la víctima, quien en aquel entonces era su pareja.
Ese contexto de violencia machista delimitó especialmente los hechos que se tuvieron por demostrados y por los cuales a usted se le ha responsabilizado en materia penal. Es así, como del dicho de la ofendida y el resto de la prueba a la que recién se ha hecho alusión, se logró determinar una serie de eventos propios del ciclo de violencia doméstica, donde se da una agresión. Después de aquella agresión se da un falso arrepentimiento suyo, para que luego se de nuevamente esta agresión.
Con una situación tan delicada, que lamentablemente forma parte de la propia violencia, que es que la violencia en este tipo de relaciones no solamente se mantiene, sino que va en incremento. Ese incremento, esa muestra sistemática de este tipo de violencia machista, en este caso, no fue la excepción.
El decisor explicó al imputado que, al valorar los 38 años y 3 meses de cárcel que le fueron impuestos, el Tribunal consideró su corta edad y que carecía de antecedentes penales, antes de dictarle un castigo aún más severo. El empacador fue encontrado culpable por el órgano jurisdiccional de homicidio calificado en grado de tentativa en perjuicio de Suárez Narváez, resistencia agravada en perjuicio de la autoridad pública; así como maltrato, amenazas contra una mujer, violación de domicilio, palabras o actos obscenos y lesiones graves en perjuicio de Montoya Espinoza.