MEP da marcha atrás a plan para eliminar aulas de informática en centros educativos
MEP aseguró que los laboratorios de informática continuarán funcionando y siendo equipados, mientras que los carritos móviles se utilizarán solo como una alternativa complementaria en los centros educativos

El Ministerio de Educación Pública (MEP) dio un paso atrás en la propuesta de eliminar las aulas de informática en más de 4.600 centros educativos del país, iniciativa que preliminarmente se implementaría en el segundo semestre de 2025.
Según dio a conocer CR Hoy en octubre de 2024, en la nota "MEP planea eliminar aulas de informática en 2025 para destinar presupuesto a carritos móviles", la cartera pretendía la "sustitución del espacio físico denominado 'laboratorio de informática' por carritos o maletas móviles", con el objetivo de reducir costos de inversión en infraestructura física dentro de los centros educativos.
La iniciativa fue presentada por el Viceministerio Académico del MEP y la Dirección de Recursos Tecnológicos en Educación (DRTE) en agosto de 2024, en el documento titulado "Generalidades del pliego de condiciones para la contratación de un proveedor de servicios gestionados bajo un contrato de entrega según demanda", al cual este medio tuvo acceso.
Se trata de un texto de 50 páginas, elaborado como borrador, con la intención de licitar equipos informáticos mediante un contrato público durante los primeros meses de 2025.
El documento expone el objetivo del MEP de imponer cambios "disruptivos" en la educación; sin embargo, no especifica las repercusiones directas para los educadores ni si esto implicaría destinar un mayor porcentaje del presupuesto a tecnología. Únicamente se hace referencia a una reducción de costos, sin detallar cómo se lograría.
"En este contexto se decide llevar a cabo la sustitución del espacio físico denominado 'laboratorio de informática' por carritos o maletas móviles. Este cambio reduce costos de inversión en la infraestructura física del centro educativo, permitiendo un mejor aprovechamiento de los recursos públicos, ya que estos carritos, al ser de naturaleza modular, se trasladan a las aulas a manera de módulos desmontables de peso razonable, que permiten una manipulación más práctica por parte de los docentes de informática educativa", describe el fundamento del proyecto de licitación del ministerio.
Otro de los cambios que pretendía implementar la cartera era la incorporación de una "nueva" asignatura a la malla curricular de formación tecnológica de manera oficial. No obstante, en la propuesta no se detallan los objetivos de dicha materia ni el plan de trabajo, y únicamente se indica que se incorporaría al currículo del sistema educativo público costarricense mediante el Programa Nacional de Formación Tecnológica (PNFT).
MEP da un paso atrás
Luego de que la propuesta no se implementara para el segundo semestre de 2025, este medio consultó al ministro de Educación, Leonardo Sánchez, quien aseguró que "los laboratorios de informática deben aprovecharse al máximo, continuar funcionando y seguir siendo equipados".
"¿Entonces qué pasa con los carritos móviles? Los carritos son un plan B complementario, un refuerzo para situaciones en las que no existe un laboratorio o cuando el tamaño del centro educativo es tan grande que un solo laboratorio no resulta suficiente. En esos casos, se cuenta con una opción móvil para llevar las computadoras a las aulas, ya sea mientras el laboratorio está en uso o cuando no hay laboratorio", agregó Sánchez en entrevista con este medio.
Además, el jerarca señaló que "los carritos móviles son complementarios, no excluyentes. No es que se tenga uno o el otro: pueden funcionar ambos. Además, la tecnología es muy cambiante y no sabemos qué nos va a deparar el futuro en tres o cuatro años. Puede que incluso las computadoras dejen de existir y todo funcione con otros dispositivos. Pero, mientras tanto, debemos aprovechar al máximo la inversión que ya se ha hecho en los laboratorios".
Sánchez resaltó que "los laboratorios de informática no son únicamente para impartir informática" y que, aunque son fundamentales para el PNFT, asignaturas como Matemáticas, Ciencias, Español, Inglés u otros idiomas pueden apoyarse en el uso de computadoras y software educativo.
"En ese sentido, los carritos móviles cobran relevancia, porque permiten que un docente de Matemáticas, por ejemplo, utilice programas informáticos para enseñar un contenido, o que se haga lo mismo en otras asignaturas. La tecnología se vuelve transversal y ya no está limitada a una sola materia. Son nuevas formas de enseñar de la mano con la tecnología. Ese es un mensaje importante: así como ocurre con la inteligencia artificial, tenemos que adaptarnos a esta nueva realidad tecnológica. Como docentes, debemos entender que nuestros estudiantes aprenden de manera distinta y que la tecnología es una herramienta clave", agregó el jerarca.
Cuestionamientos por desperdicio de recursos
Durante esta administración, el ministerio ha sido ampliamente criticado por el desperdicio de recursos, principalmente en el área tecnológica. Tal como dio a conocer este medio en junio de 2024, la cartera desaprovechó ¢1.070 millones asignados en el presupuesto de 2023 a la DRTE para la compra de equipo destinado al desarrollo de los estudiantes mediante el uso de la tecnología.
La documentación de la liquidación presupuestaria del Programa 555-00: Aplicación de la Tecnología a la Educación, entregada el 15 de diciembre de 2023, detalla los montos que no se ejecutaron ese año. Según los datos, a la DRTE se le giró un total de ¢1.171 millones para el rubro de tecnología en centros educativos, de los cuales solo se utilizó poco más de ¢100 millones. Es decir, no se ejecutó ni el 9 % de los recursos disponibles.
Así consta en la información presentada ante el despacho del Viceministerio de Planificación Institucional y Coordinación Regional, donde se rinden cuentas de la ejecución presupuestaria y se expone que la subpartida 50103, destinada a la adquisición de equipo de comunicación, no registró ejecución alguna. Esto confirma que ¢86,2 millones no fueron invertidos, por lo que figuran como presupuesto sin ejecutar.
Ese mismo mes, este medio dio a conocer que, debido a problemas con plazos para compras de mayor cuantía, errores en el cálculo de suministros, falta de documentación o mala imputación de recursos, el MEP renunció o redireccionó montos que, en conjunto, alcanzan los ¢8.578.448.815, solicitados en el presupuesto de 2024 para la compra de equipo tecnológico.