Mortalidad materna se triplicó en el último año
Puntarenas tuvo en 2024 la mortalidad materna más alta desde 2016

La mortalidad materna, un indicador de salud pública, se triplicó en Costa Rica en el último año, según revelan datos del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC).
En 2023, ocurrió una muerte de una mujer durante el embarazo o el parto por cada 10.000 nacidos vivos, pero en 2024 la cifra ascendió a 3,27 fallecimientos, convirtiéndose en la tercera más alta de los últimos nueve años.
El panorama de las muertes maternas varía de provincia a provincia. En el caso de San José, en un solo año pasó de menos de una muerte por cada 10.000 nacimientos (0,71) a prácticamente cuatro, ya que la cifra de 2024 cerró en 3,90. De hecho, en la capital del país se registró en 2023 la mortalidad materna más alta desde 2016.
Afortunadamente, en Alajuela la realidad es diferente, ya que la mortalidad viene disminuyendo desde 2020, cuando se ubicó en 6,18. Según el último reporte del INEC, actualmente se encuentra en 0,99 muertes de madres por cada 10.000 nacimientos.
Durante dos años, en 2022 y 2023, en Cartago no hubo fallecimientos maternos, pero en 2024 la razón de mortalidad materna alcanzó 4,3, superando incluso el promedio del país, que cerró en 3,27. Una situación similar se dio en Guanacaste, que pasó de no registrar mortalidad materna en 2022 y 2023 a alcanzar 2,42 en 2024.
Por su parte, Heredia pasó de una mortalidad materna de 0 en 2023 a 4,86 en 2024, siendo esta la cifra más alta para la provincia en los últimos nueve años y la más elevada de todo el país. La cifra más cercana se dio en 2016, cuando se registraron 4,71 muertes maternas por cada 10.000 nacidos vivos.
Puntarenas tuvo en 2024 la mortalidad materna más alta desde 2016, ubicándose en 3,92 y aumentando aproximadamente dos puntos en solo un año. Limón fue la segunda provincia con la mortalidad materna más alta en 2024, alcanzando 4,08.
Todas las provincias del país experimentaron un aumento considerable en esta cifra de 2023 a 2024, a pesar de las disminuciones que se habían registrado desde 2015.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), en 2022 ocurrieron 287.000 muertes maternas en el mundo, y el 95 % de ellas se dieron en países de ingresos bajos o medios.
Datos de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) revelan que en Latinoamérica y el Caribe mueren aproximadamente 8.700 mujeres por complicaciones en el embarazo o el parto.
Las inequidades de nivel socioeconómico, género, etnia, educación, lugar de residencia y edad son factores determinantes en la mortalidad materna.
Nueve de cada diez muertes maternas son evitables si se aplican las medidas y recomendaciones que han demostrado ser efectivas: cuidados maternos de calidad, acceso universal a los métodos anticonceptivos y lucha contra las desigualdades en el acceso a la salud, asegura la OPS.
Además, la OMS destaca que la mayoría de estas muertes pudieron haberse evitado o tratado, ya que algunas afecciones preexistentes se agravan con la gestación, especialmente si no se atienden como parte del cuidado de la mujer.
Las principales complicaciones que causan aproximadamente el 75 % de todas las muertes maternas en el mundo son:
- Hemorragias graves (mayoritariamente tras el parto).
- Infecciones (generalmente tras el parto).
- Hipertensión arterial durante el embarazo (preeclampsia y eclampsia).
- Complicaciones en el parto.
- Abortos.