¿Quién dice que el fin último de las relaciones sexuales es la penetración? Esa es, básicamente, la premisa del "petting" una nueva tendencia sexual que apuesta al erotismo y las caricias sin llegar a la culminación del coito. Es algo así como los "preliminares" pero extendidos, sin fin…
El petting obtiene su nombre de la expresión en inglés "to pet". Se trata de una tendencia que se enfoca en las caricias, los besos, los abrazos, el toqueteo y todo lo que pueda promover la excitación sexual pero sin llegar a la penetración.
¿Cómo se practica? Según los especialistas hay varias etapas. En la primera estapa, la pareja se limita a darse la mano, besarse y acariciarse. En la segunda etapa se intensifican los toqueteos en todo el cuerpo, eso sí, con ropa… En la etapa final, las caricias llegan bajo la ropa o con la pareja desnuda. Con esto, dicen los sexólogos, se busca sensibilizar y estimular todo el cuerpo, más allá de los genitales.
¿Entonces no hay orgasmo? Sí, sí que lo hay pues el petting promueve la masturbación: ya sea que la pareja la practique uno al otro o que cada quien lo haga frente a su "media naranja" buscando el propio placer sin que haya penetración. Además, puede incluir la práctica del sexo oral.
Quienes lo practican aseguran que ofrece toda una serie de ventajas, comenzando con una función profiláctica y anticonceptiva, pues brinda placer sin el riesgo del embarazo no deseado. Además garantiza una disminución en la presión sobre el "desempeño" de ambos durante la relación sexual.
Muchos sexólogos han comenzado a recomendar esta técnica pues aseguran que pueda ayudar a las parejas que atraviesan por determinadas crisis o que presentan problemas como anorgasmia, bajo deseo sexual y hasta impotencia.