Plasma de pacientes recuperados está listo para ser usado en hospitales
(CRHoy.com).- El plasma convaleciente donado por pacientes recuperados, ya está listo para ser usado, pero se está a la espera de que el paciente a quien se le vaya a aplicar cumpla con el protocolo médico.
Así lo explicó este viernes Román Macaya, presidente ejecutivo de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS), quien dio detalles sobre el tratamiento que se realizará.
"El protocolo para la aplicación en un paciente nuevo se define porque, ese paciente tuvo que haber sido hospitalizado y haber estado en el hospital por menos de 14 días. En este momento, tenemos plasma convaleciente ya listo, preparado. Lo que estamos es esperando que tengamos el perfil idóneo del paciente de acuerdo con el protocolo para aplicarle el plasma y medir su impacto", explicó.
En este momento hay 14 pacientes hospitalizados en todo el país. Sin embargo, para aplicarle el plasma, deben clasificar de acuerdo con el protocolo médico.
Hasta este jueves 21 de mayo se contabilizaban 19 personas donantes, del total de recuperados. El resto, no se ha acercado a realizar la donación.
Para captar esta sangre, los médicos no solo deben verificar que la persona se recuperó de COVID-19, sino que también deben estar seguros de que son personas sanas que no tienen en su sangre otros virus como los que causan la Hepatitis B, C o el de Inmunodeficiencia Humana (VIH).
La sangre de las personas recuperadas ya contiene defensas contra el COVID-19, por lo que al hacer la transfusión el paciente las recibirá y le ayudarán con su recuperación.
Cuando avance la captación de sangre y haya la suficiente para dotar a los hospitales del país que están atendiendo los casos activos, la CCSS también trasladará sangre de personas recuperadas al Instituto Clodomiro Picado (ICP) de la Universidad de Costa Rica (UCR), donde producirán un tratamiento bajo la misma premisa: la sangre de las personas recuperadas ya contiene anticuerpos contra el COVID-19 que se pueden usar en personas aún no recuperadas.
Sin embargo, el ICP produciría un tratamiento altamente puro, que reduce la posibilidad de efectos secundarios. Esta sería la segunda etapa en el uso de la sangre de convalecientes, pues en la primera solamente se hace la transfusión de sangre en hospitales.
Una tercera etapa también inició su trámite en la UCR, pues en el mismo ICP desarrollan el tratamiento contra el COVID-19, pero con la ayuda de caballos. A 6 equinos se les inyectarán proteínas del virus SARS-COV2, que produce el COVID-19. Como respuesta natural, su organismo desarrollará defensas que serán extraídas y procesadas por los científicos para que terminen siendo un fármaco contra el virus.
Este es un tratamiento esencial en medio de la pandemia, pues hasta ahora los profesionales cuentan con medicamentos para tratar los síntomas que provoca el COVID-19. Sin embargo, no hay un fármaco que pelee contra este coronavirus en particular. Esta nueva opción lucharía contra el SARS-COV2 y podría lograr expulsarlo del cuerpo.