OIJ investiga posible influencia en Costa Rica del régimen Ortega-Murillo para ejecutar crímenes

El Organismo de Investigación Judicial (OIJ) investigará la posible presencia de un brazo del régimen de Nicaragua, comandado por Daniel Ortega y Rosario Murillo, que podría estar operando en suelo costarricense para ejecutar crímenes contra opositores en el exilio.

Roberto Samcam, exjefe militar en retiro y una de las voces más críticas contra la dictadura, fue asesinado por al menos dos personas dentro de un complejo de apartamentos donde residía, en San Vicente de Moravia, el pasado jueves.

Randall Zúñiga, director del OIJ, adelantó a CR Hoy que, si bien sería precipitado concluir que el crimen fue orquestado desde el gobierno sandinista, esta es una posibilidad que se baraja y se indagará para descartar o confirmar. 

Ahora los investigadores del caso intentan dar con los autores materiales del asesinato: es decir, tanto con el gatillero que ingresó hasta la puerta de la vivienda para matar a Samcam como con su cómplice.

Las indagaciones también se enfocarán en determinar la autoría intelectual, para establecer si alguien ideó y ordenó el homicidio.

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La preocupación se eleva dado que, en un pasado reciente, se ejecutó otro atentado contra Joao Maldonado, un joven cuya voz opositora ha resonado, y a quien intentaron asesinar en San Pedro de Montes de Oca en enero de 2024.

"Como un antecedente también ocurrido en Costa Rica, tenemos que hace unos meses, en un caso que ya fue esclarecido por parte del OIJ, a otro activista opositor del régimen de Daniel Ortega le intentaron asesinar y le impactaron en múltiples ocasiones con arma de fuego. 

Esta persona logró sobrevivir a este ataque. De esta forma, el Organismo de Investigación Judicial está tomando los dos casos con toda la seriedad correspondiente y esperamos que prontamente podamos tener algún resultado sobre el mismo", dijo el jefe policial en declaraciones públicas el día del homicidio de Samcam.

En el pasado, la policía judicial ya ha detectado la presencia de fuerzas criminales extranjeras operando en suelo nacional, principalmente estructuras vinculadas al trasiego internacional de drogas.

Roberto Samcam se encontraba dentro de su vivienda la mañana del jueves. Esta se ubica en un residencial cerca de Plaza Lincoln. Un gatillero lo llamó a la puerta y, cuando él se acercó, lo mató con al menos ocho disparos en el tórax y las extremidades.

Al menos dos personas estarían involucradas en el atentado. El pistolero y su cómplice habrían rondado en un vehículo el residencial donde vivía la víctima. El gatillero ingresó, subió al segundo piso y, aprovechando que la puerta estaba abierta, llamó a Samcam antes de dispararle.

Actualmente, el OIJ intenta dar con los responsables del hecho.

Advertencias

Antes de ser asesinado, el mayor en retiro del Ejército de Nicaragua denunció públicamente la existencia de una célula de sicarios operando desde la embajada de ese país en San José.

Según reveló en una entrevista a Darío Medios Internacional, el régimen Ortega-Murillo habría desplegado agentes de inteligencia para vigilar y atacar a opositores nicaragüenses refugiados en territorio costarricense.

De acuerdo con Samcam, esta red clandestina, amparada por la estructura diplomática, estaría compuesta por oficiales enviados desde Managua a través de la Dirección de Información para la Defensa (DID), el órgano de inteligencia del Ejército nicaragüense.

Las operaciones se habrían intensificado tras la represión de las protestas de abril de 2018, que provocaron la migración de miles de nicaragüenses a Costa Rica.

El opositor identificó una estructura con más de 20 oficiales sin cargos oficiales visibles. Samcam aseguró que las embajadas y consulados funcionan como centros de espionaje con cobertura institucional, y que algunos miembros de estas células fueron identificados, provocando su repliegue o retorno a Nicaragua.

Afirmó además que uno de los casos más alarmantes fue el atentado contra Joao Maldonado y su esposa, acción que describió como típica del modus operandi de este aparato: ubicar, seguir y contratar sicarios para ejecutar el ataque.

“Mandaban gente para ubicar y tratar de hacer daño. (…) La denuncia pública es nuestra única arma”, afirmó Samcam, al señalar que el gobierno de Rodrigo Chaves ha negado la existencia de esta célula.

Sin embargo, advirtió que los altos índices de criminalidad en el país son utilizados para camuflar atentados políticos como simples hechos violentos.

Líderes nicaragüenses denuncian persecución

Óscar René Vargas, economista, sociólogo y analista político, es un veterano de la lucha política y una de las voces académicas más destacadas y respetadas de Nicaragua.

Pasó de formar parte del Frente Sandinista de Liberación Nacional y salvar la vida de Daniel Ortega, al exilio en Costa Rica, desde donde ha criticado y denunciado al régimen conformado por el comandante y su esposa, la copresidenta Rosario Murillo.

Vargas fue una de las últimas personas en ver con vida a Samcam, durante las 24 horas previas al crimen. Compartieron un almuerzo junto a un tercer amigo, en un establecimiento cerca de La Sabana, luego de que Roberto regresara al país tras visitar por dos meses a sus hijos y hermanos.

Óscar René no dudó en responsabilizar al régimen dictatorial por el asesinato, y condenó públicamente a Ortega y Murillo por acabar con la vida del líder opositor.

En entrevista con CR Hoy, también aseguró que existe una operación en suelo tico para reprimir o eliminar voces que han denunciado los actos del régimen.

"Yo creo que sí. Ese es un problema que hay aquí, pero lo que creo yo más bien es que este es un problema para la seguridad misma de Costa Rica.

Por el el tipo de acción, este es un trabajo de sicariato. No creo que sean las mismas personas (que los homicidas intelectuales), sino también puede surgir como el caso de Maldonado.

Puede ser costarricenses que son comprados por dinero. El problema es que ese sicariato también tiene que ver un poco con el tema del narcotráfico en Costa Rica.

La dictadura de Ortega está utilizando ese tipo de personas para ejecutar acciones políticas y esto crea un problema de la seguridad no solamente para los los que estamos en el exilio aquí, sino también para los mismos costarricenses", puntualizó.

Tal como reveló CR Hoy horas después del crimen, el coronel en retiro había denunciado seguimientos y vigilancias previas al homicidio.

Samcam dio aviso a la Dirección de Inteligencia y Seguridad (DIS), órgano adscrito al Ministerio de la Presidencia. Sin embargo, se desconoce cómo procedió dicha entidad. Pese a las consultas de este medio, no ha sido posible obtener una respuesta oficial.

Luego de que el OIJ concluyó las diligencias en la escena del crimen, Claudia Vargas, esposa de Samcam, salió entre lágrimas y, en una breve atención a la prensa, recordó que ambos compartían la preocupación por su seguridad.

Además, dejó entrever que consideran que el crimen pudo tener motivaciones políticas, ya que su esposo no tenía conflictos personales más allá de su abierta postura contra el régimen nicaragüense.

"Lo recuerdo coherente, lo recuerdo fuerte. Roberto era una voz poderosa y que además elevó una denuncia directa a la dictadura. Nunca anduvo en absolutamente ningún mal paso, ni absolutamente nada.

Su tema era la promoción de derechos humanos en Nicaragua y la denuncia constante a lo que estaba pasando", puntualizó Vargas, quien también agradeció los mensajes de solidaridad y pidió espacio para la familia.

Atentado contra Joao Maldonado

La investigación por el atentado a balazos contra el activista nicaragüense exiliado Joao Maldonado y su esposa, Nadia Robleto, concluyó oficialmente. Sin embargo, el principal sospechoso, el periodista Danilo Aguirre Sequeira, se encuentra actualmente en Nicaragua, lo que complica su captura y eventual enjuiciamiento.

El ataque ocurrió el 10 de enero de 2024 en San Pedro de Montes de Oca, cuando la pareja fue emboscada por dos sujetos en motocicleta que dispararon al menos ocho veces. Ambos sobrevivieron, aunque resultaron gravemente heridos.

Las pesquisas del OIJ permitieron identificar a Aguirre, quien presuntamente colaboró en tareas de seguimiento y vigilancia previas al atentado. Él ha sido visto circulando libremente por Managua, incluso tras aparecer en un accidente de tránsito este mismo junio.

A pesar de estar plenamente identificado, su extradición es inviable, ya que Nicaragua no permite entregar a sus ciudadanos.

Según el subdirector del OIJ, Michael Soto, las pruebas en su contra incluyen testigos, grabaciones y registros migratorios que demuestran que ingresó ilegalmente a Costa Rica antes del atentado. La Fiscalía deberá ahora definir si solicita su procesamiento en Nicaragua o intenta otras vías diplomáticas.

El activista Maldonado denunció en medios internacionales que Aguirre vive cómodamente en ese país, lo que considera una recompensa del régimen de Daniel Ortega, al que el sospechoso estaría vinculado.

Junto a Aguirre, otros cinco sospechosos fueron identificados o detenidos, entre ellos varios ciudadanos nicaragüenses. Las autoridades no descartan que el crimen haya sido planificado desde el país vecino, pero establecer la autoría intelectual sigue siendo un reto.

Este no fue el primer intento de asesinato contra Maldonado. En septiembre de 2021 también fue atacado por sicarios en moto, en lo que se considera parte de un patrón de persecución contra opositores al régimen sandinista. Maldonado, uno de los fundadores de la Unidad de Exiliados Nicaragüenses, vive en Costa Rica desde 2018 tras huir de la represión en su país.