Presupuesto para FEES seguirá decayendo en los próximos 3 años
Entre el 2019 y el 2022 el total de ingresos transferidos al FEES y a la Universidad Técnica Nacional disminuyó un 7,72%.
(CRHoy.com) El presupuesto para el Fondo Especial para la Educación Superior (FEES) tendrá una reducción en términos reales del presupuesto público asignado a las universidades estatales en los próximos 3 años.
Según detalla el IX informe del Estado de la Educación 2023, la posibilidad de sostener y aumentar el nivel de actividad de las universidades públicas podría verse afectada.
De acuerdo con la investigadora Marcela Román, con datos disponibles a mayo de 2023, se plantearon 4 escenarios de financiamiento de la educación universitaria para los años 2024-2026 y las proyecciones apuntan en que se continuará percibiendo una reducción en los recursos.
"Considerando las proyecciones del Banco Central de Costa Rica sobre inflación y comportamiento del Producto Interno Bruto y, del Ministerio de Hacienda, sobre la aplicación de la Regla Fiscal, la proyección para el periodo 2024-2026 indica que continuará una reducción del FEES en términos reales", explicó.
La incertidumbre y preocupación de las universidades públicas es clara, ya que el informe establece una realidad que viven los estudiantes y rectores quienes mantienen una lucha en la asignación del presupuesto, mismo que va encaminado a la baja.
El panorama del Fondo Especial para la Educación Superior se ha deteriorado en años recientes.
"Entre el 2019 y el 2022 el total de ingresos transferidos al FEES y a la Universidad Técnica Nacional (que no era parte del Fondo hasta el 2023) disminuyó un 7,72% en términos reales", menciona el informe.

Datos del IX informe del Estado de la Educación.
De acuerdo con la investigadora, el 2020 fue el momento más crítico, esto debido a que la pérdida registrada fue de 5,64%, y que desde la última negociación quinquenal 2010-2015 no existen parámetros formales para determinar el monto que el Gobierno de la República le asigna al FEES de manera anual.
"En atención a la grave crisis que enfrentó el país por la pandemia, las universidades públicas aceptaron una asignación menor al monto constitucionalmente garantizado y gestionaron de manera eficiente los ajustes en el corto plazo. Pero el incumplimiento constitucional no puede ser una política de Estado y amenaza en el futuro, mantener y ampliar la acción sustantiva de las universidades", señaló la investigadora.
Por su parte, de acuerdo con las proyecciones que realizó el noveno informe, donde se sondeó a 19 expertos, la demanda legítima de las universidades de que se respete el porcentaje establecido a nivel Constitucional para la definición del FEES, es poco factible que se cumpla en los próximos años.
La investigadora mantiene que no se prevé un escenario más amplio de recursos para las próximas negociaciones "tanto por la falta de voluntad gubernamental como por las restricciones que impone la Regla Fiscal", explicó Román.
Asimismo, el documento señala que el FEES representa entre el 82% y 92% de los ingresos corrientes en todas las universidades públicas.
Afectación presupuestaria
Con la llegada de la pandemia, la crisis del país aunado a las restricciones fiscales que se aplicaron las universidades públicas, aplicó ajustes internos para no comprometer su nivel de operación.
Ante esto, el informe detalló que las U públicas lograron gestionar la crisis con una reducción sustancial del gasto en remuneraciones y otras medidas de contención del gasto.
Entre el 2020 y el 2022 el gasto ejecutado en remuneraciones se contrajo en términos reales.
"Ahora la preocupación medular en términos de sostenibilidad financiera es que, aunque se hayan logrado estas mejoras en la eficiencia del gasto, y se pueda continuar la mejora en el futuro, sin un aumento del FEES no habrá recursos para crecer sustantivamente en cobertura, investigación o proyectos de acción social", detalla en informe.
Con estas reducciones la experta menciona la siguiente incógnita y es ¿Cómo saldrá de la crisis un país que no invierte sostenidamente en educación?
Esta realidad es lo que ha motivado a cientos de estudiantes a salir a las calles a pedir una educación de calidad, donde la inversión en educación decrece y el futuro se ve aún más incierto.
En los últimos meses, tanto universitarios como colegiales han salido a protestar, pidiendo que se otorgue el 8% del PIB que constitucionalmente debe invertirse en educación, mismo que no se ha ejecutado de dicha manera desde las últimas 3 administraciones.
Desafíos operativos
Por su parte, según el informe del Estado de la Nación, las universidades públicas han enfrentado desafíos operativos significativos en los primeros años de restricciones fiscales y financieras, que los ha obligado a realizar ajustes internos para mantener la eficiencia en el uso de los recursos.
A corto plazo, las universidades públicas experimentarán un aumento en la matrícula, sin registrar afectaciones significativas en materia de investigación. Además, en el ámbito de acción social y vida estudiantil, ampliaron los servicios brindados.
Una de las estrategias utilizadas para gestionar la crisis fue la reducción del gasto en remuneraciones y otras medidas de contención.
Entre 2020 y 2022, el gasto ejecutado en remuneraciones se contrajo en términos reales, con un promedio de disminución del -10,6%, aunque hubo variaciones entre las diferentes universidades.
Según proyecciones y encuestas a expertos, el informe sugiere que es poco probable que se cumpla el piso garantizado en la Constitución para la definición del FEES en los próximos dos o tres años, debido a la falta de voluntad gubernamental y las restricciones impuestas por la Regla Fiscal.