Crónica: La noche en la que murió el muñeco (desde las Ruinas)
Brumosos festejaron título hasta las 5 a.m. de este jueves
(CRHoy.com).-El muñeco murió. El muñeco ya no existe. Su vela fue una fiesta. El Club Sport Cartaginés es el nuevo campeón del balompié nacional.
Cientos de personas se reunieron en la Plaza Mayor de Cartago para ser testigos del fin de una "maldición" que cargaba toda una provincia. Fueron 81 años de espera, y anoche se rompió el hechizo.
La Municipalidad de Cartago puso una pantalla que no alcanzó para la gran cantidad de personas que querían ver lo que algunos bautizaron una epopeya futbolística.
Faltaba una hora para el inicio del partido y ya no había espacio. Nadie quería perder ningún "detalle" de los que hablaba el técnico Rudé. Los primeros lugares se agotaron y los palcos improvisados aparecieron: el mejor campo fue ese anillo del nuevo Monumento de la Independencia, llamado "Costa Rica Victoriosa".
Al frente, en una tarima, el exfutbolista cartaginés, Bernal Mullins y "Max", la mascota del equipo blanquiazul, animaban a los feligreses que llegaron puntuales. El canto "azul, azul" se empezaría a escuchar y retumbaría hasta las 5 a.m. del jueves.
Escribí estas líneas, de pie, sobre una de esas clásicas bancas de cemento que se ubican frente a las Ruinas de Santiago Apóstol. No sé cómo, pero ahí estábamos 7 personas. Fue la única forma que había para ver el partido.
Los jugadores salieron al campo y los aplausos calentaron una noche bastante fría y lluviosa. La muerte del muñeco no podía ser diferente: se murió un 6 de julio, entre brumas a 14º grados de temperatura.
Desde el corazón de la Vieja Metrópoli, la afición alentó. Hubo festejos cada vez que el portero Kevin Briceño ahogó el grito de gol del alajuelense Celso Borges.
Se tragó grueso. Nerviosismo al máximo. El primer tiempo permaneció 0-0. Los embates manudos no pasaron a más. Cartaginés mantenía la ventaja obtenida con el gol inmortal de Jeikel Venegas en el juego de ida.
El primer tiempo terminaría entre júbilo brumoso, pero el balde de agua fría cayó al minuto 57′. Hubo lamentos por la forma en cómo se cometió la falta que al final originaría el gol de la Liga.
El cabezazo de Alexis Gamboa ponía a soñar a los manudos en el estadio Morera Soto, mientras que en las Ruinas hubo silencio. Eso sí, un par de banderas rojinegras aparecieron en medio del mar azul.
Pero la esperanza brumosa permanecía: en especial por los goles de los últimos minutos que caracterizaron la doble serie contra Alajuelense. El tiempo pasó y el 1-0 no cambió.
Gol inolvidable
Eran las 9:58 p.m. y en el chat de WhastApp "Cartagos", un hombre anuncia los tiempos extra y de seguido la plegaria "Dios ayúdanos".
Este grupo de WhatsApp nació primero como la Red Electrónica de la Fuerza Azul, una red de correos, fundado por Roberto Castro. Él la describe como una familia, en la que ya pasaron 20 años y ahora evolucionó a un chat de WhatsApp.
9:59 p.m. Otro miembro del grupo responde "quiero ser campeón". Un tercer participante escribe "si no es sufriendo, no sabe". A todos los integrantes del grupo se les cumplió su deseo.
En los tiempos extra, el equipo de Segura y Wright terminaría por destruir cualquier tipo de mito, maldición y muñeco.
Minuto 104′. Marcel Hernández encuentra a José Luis Quirós por la banda derecha, llegó el centro preciso a la cabeza de Arturo Campos y el gol que liquidó la serie. El gol que aniquiló al muñeco.
En Cartago, el júbilo estalló. Abrazos, choque de manos y el grito a todo pulmón de un gol que será inolvidable. Ese número 14 -incluso desconocido para algunos brumosos- quedará grabado en la historia del club.
En la tarima, Bernal Mullins celebró. Más adelante, en una entrevista reconoció que es imposible describir los sentimientos que tenía. La emoción brilló por sus ojos. Quedó conmovido al ver la gente vibrar y cantar.
Por aquellos que ya no están
Cuando cayó el gol, Gerald Brenes lloró de la emoción. Él es "Max", la mascota de Cartaginés. Lleva más de 20 años vistiendo al manigordo y al terminar el partido me cuenta que lloró por todos aquellos que ya no están.
"Por los tíos, por los abuelos, por todas las personas que murieron y que no pueden celebrar este campeonato", expresa.
Un sentimiento similar narró Kevin Fernández, un comerciante del mercado de Cartago. Él comentó que durante todo el segundo tiempo extra recordó a su papá Marvin, un gran aficionado brumoso.
"Estoy seguro que está celebrando en el cielo. Recordé tantas cosas… Ha sido demasiado emocionante vivir este momento".
Los últimos 15 minutos fueron eternos, pero ya la historia estaba escrita. En el estadio Morera Soto, un papá y su hijo lloran de la emoción. Están rodeados de alajuelenses que quedan conmovidos con la escena.
El padre no puede creer lo que ve. Llora, se sienta y su hijo lo abraza. El niño lo consuela. El árbitro pita. Ambos lloran y se abrazan. "Lo logramos", grita el menor. Es imposible no llorar. El video fue publicado por la página Pasión por el fútbol en Facebook.
Campeón en casa
El muñeco murió. La fiesta fue en grande. La gente se tiró a las calles y recibió al equipo campeón hasta la madrugada. En Cartago se habla del gran esfuerzo del presidente Leonardo Vargas y de un grupo de futbolistas que sacó adelante una hazaña inolvidable.
"Ya nos podemos morir tranquilos", dijo Gerardo Ramírez durante la presentación del grupo Los Hicsos en la Plaza Mayor de Cartago. Este triunfo es mucho más que fútbol.
El muñeco y todas sus leyendas murieron un 6 de julio de 2022.