Sectorización de buses iniciará sin infraestructura y con carriles exclusivos descuidados
El CTP espera atraer usuarios al sistema de transporte público, pero existen limitaciones
El esperado proyecto de sectorización de buses en San José sigue sin una fecha clara para dar inicio, pero lo que sí se sabe es que empezará como plan piloto en Tibás-Santo Domingo, aunque sin todas las condiciones necesarias.
La sectorización divide el área metropolitana de San José en 12 sectores. La idea es que de cada uno de ellos vengan al centro de San José solo algunas rutas, llamadas troncales.
Mientras tanto, dentro de cada sector habrá rutas alimentadoras que moverán a los usuarios de un lado a otro y los llevarán a sitios de conexión para tomar alguna de las rutas troncales.
Una de las carencias es la infraestructura óptima para las paradas de bus y sitios de intercambio. Rafael Herrera, director del CTP, aseguró que la responsabilidad de construir terminales de buses recae en las municipalidades y que, aunque hay coordinación con ellas, el desarrollo de esta infraestructura quedará para "más adelante".
Un criterio contrario tiene el intendente de Transporte de la Autoridad Reguladora de los Servicios Públicos (Aresep), Paolo Varela. El funcionario mencionó a CR Hoy que la infraestructura es una de las condiciones requeridas para el inicio de la sectorización.
"Para que pueda entrar en operación el MOPT-CTP debe tener listo lo correspondiente a la infraestructura de los sitios de intercambio y garantizar la sincronización de los servicios para favorecer una buena experiencia a los usuarios", comentó Varela.
Sectorización mantendrá carriles exclusivos
Otra deficiencia que reconoce el director del CTP es la poca vigilancia que han tenido los carriles exclusivos de bus. Estos carriles se han habilitado en sitios como Guadalupe, Tibás o San Pedro y, aunque existe señalización vertical y horizontal, lo cierto es que no se respeta.
El problema en este caso, según Herrera, es que la Policía de Tránsito carece de recursos y personal suficiente para la regulación de estos carriles. Por eso, una de las posibles soluciones es implementar vigilancia a través de medios electrónicos.
El Consejo Nacional de Concesiones (CNC) está justamente valorando un proyecto que plantea el uso de cámaras para vigilancia del tránsito, por medio de las cuales se podrían hacer multas. Sin embargo, lleva un avance distinto y no está contemplado que entre a funcionar junto con la sectorización.
Los carriles de buses existentes se mantendrán para la sectorización, dijo Herrera. Sin embargo, sin un control efectivo, los buses deberán seguir compitiendo por espacio con los vehículos particulares en vías ya congestionadas, algo que podría comprometer la promesa de que la sectorización acortará los tiempos de viaje para los usuarios.
"Si le estamos inyectando más vehículos al sistema lo estamos saturando y eso hace que cualquier medio de transporte sufra en sus tiempos de recorrido". Rafael Herrera, director del CTP.
Apuesta del CTP
A pesar de estas limitaciones, el Consejo de Transporte Público (CTP) espera que la sectorización traiga de vuelta a usuarios del transporte público que han dejado de usar el sistema.
Desde la pandemia, la cuota de personas que usa el sistema de buses ha venido en caída. Menos usuarios se traduce en menos ingresos, lo que ha llevado a decenas de empresas a abandonar rutas por baja demanda y rentabilidad.
"Creo que si logramos sectorizar y el sistema es efectivo desincentivaría a los usuarios a utilizar transporte ilegal, eso es lo que se pretende, pero no es una formula mágica", aseguró Herrera.