Sospechoso de ataque con ácido ya había estado preso por agredir a la misma mujer
Luis Calero Peña, sospechoso de lanzar ácido de batería a su expareja Joselyn Vallejos el pasado 14 de abril en Cartago, ya había estado en prisión años atrás por agresiones previas contra la misma mujer.
Así lo reveló la propia víctima en entrevista con CR Hoy donde relató cómo el historial de violencia física y psicológica marcó su relación hasta que logró separarse de él hace aproximadamente cuatro años.
"Cuando terminamos hace 4 años fue por lo mismo, por las agresiones. Él me pegaba. Ya había estado preso por eso, hace como 3 años. Estuvo año y resto", indicó Joselyn a este medio.
A pesar de que existían medidas de protección vigentes, como la orden de no acercarse a menos de 500 metros, Joselyn contó que el sujeto violó esas restricciones en varias ocasiones, sin que esto impidiera el ataque más reciente.
Orden de captura no evitó que se mantuviera en fuga casi 4 meses
Tras el ataque con ácido, Calero Peña se mantuvo prófugo durante casi cuatro meses, hasta que el Organismo de Investigación Judicial (OIJ) logró detenerlo ayer martes 5 de agosto en San Isidro de San Ramón.
A pesar de que pesaba sobre él una orden de captura activa desde el día del hecho, el sospechoso logró evadir a las autoridades durante meses, mientras la víctima vivía con temor constante.
Durante ese tiempo, Joselyn denunció que Calero intentó comunicarse con ella insistentemente, a pesar de las medidas cautelares.
"Él me estuvo llamando y escribiendo. Me decía que le contestara las llamadas, que necesitaba hablar conmigo, aunque sea un ratito. Yo nunca le contesté, solo se lo informé al OIJ. Todo se lo dije al OIJ", relató.
Un año de prisión preventiva
Luis Calero Peña enfrentó este miércoles la toma de declaración indagatoria ante la Fiscalía de Género de Cartago, por el presunto delito de tentativa de femicidio. El Ministerio Público informó hace unos minutos que el hombre estará un año en prisión preventiva.
Los hechos ocurrieron en la vivienda de Joselyn, en Aguacaliente de Cartago, cuando, según su testimonio, fue sorprendida por su agresor sin previo aviso ni discusión.
"Yo con él no discutí, sino que él solo llegó, me golpeó y me tiró el ácido. Ya no vivía conmigo, teníamos como 4 años de estar separados. Lo que pasa es que él nunca aceptó que yo ya no lo quisiera más. Él siempre me seguía buscando pese a que yo ya no quería nada con él. Fueron muchos los abusos.
Yo no había ni visto cuando él entró. Solo sentí un golpe en la cara. Gracias a Dios metí las manos y no me cayó el ácido en los ojos, sino en las manos, la nariz, boca, parte del tórax, quijada y en las piernas. Me dijo que si no iba a estar con él, no iba a estar con nadie más".
Joselyn sufrió quemaduras de tercer grado en varias partes del cuerpo, permaneció hospitalizada más de dos meses y actualmente continúa en recuperación.
La víctima pide que se haga justicia y que su caso no quede impune, sobre todo por el peligro que representó Calero Peña incluso después de cumplir una condena previa.
