Sugef: Caja de Ande omitió 172 recomendaciones de la auditoría interna

Caja de Ande
La Superintendencia General de Entidades Financieras (Sugef) advirtió a la junta directiva de la Caja de Ahorro y Préstamos de la Asociación Nacional de Educadores, conocida como Caja de Ande, sobre debilidades en la cultura de control al detectar la omisión de decenas de recomendaciones emitidas por la Auditoría Interna desde 2019 y que aún no se cumplen.
Así lo señala el informe SGF-DSI-0053-2025, elaborado por la División de Supervisión de la Sugef tras un estudio iniciado en mayo de 2025 y cuyos resultados se emitieron el 12 de setiembre de este año.
"(…) se evidencian debilidades en la cultura de control, dado que el Órgano de Dirección no promueve una atención oportuna de las recomendaciones emitidas por la Auditoría Interna; y la Alta Gerencia incumple en su responsabilidad de implementar las recomendaciones de los auditores internos y externos, así como en la atención de los acuerdos de la junta directiva y las recomendaciones de la unidad de riesgos", describe el documento.
El análisis estableció que existen 172 recomendaciones pendientes de atender, de las cuales 148 ya vencieron. Algunas datan de 2019 y 2020.
La junta directiva acordó en noviembre de 2024, según consta en actas, elaborar un plan de acción en enero de 2025 para conocer dichas recomendaciones, pero este no se ejecutó en la fecha acordada.
Ante consultas de directivos durante el año, se justificó que el plan estaría listo hasta junio de 2025.
"Lo anterior, también evidencia un incumplimiento a las funciones del Comité de Auditoría, de vigilar que la Alta Gerencia adopte las acciones correctivas necesarias de manera oportuna para hacer frente a las debilidades de control, el incumplimiento de las políticas, leyes y reglamentos, así como otras situaciones identificadas por los auditores".
La Auditoría Interna también aparece señalada en el informe: Destaca que esa oficina no propició la formulación de una política ni lineamientos para el seguimiento de las recomendaciones ni la aprobación de prórrogas cuando correspondiera.
Además, no se evidencian gestiones ante el Comité de Auditoría y la junta directiva para atender las recomendaciones pendientes. Tampoco existe un informe específico que muestre su estado, nivel de riesgo, prioridad, responsables y antigüedad.
Incluso en el informe AI N.° 01-2025 de la Auditoría Interna se reveló que permanecen sin implementar recomendaciones que datan de 2017.
Otras recomendaciones omitidas
La superintendencia también señaló que la junta directiva no dio seguimiento para que la gerencia cumpliera los acuerdos emitidos sobre otros aspectos.
Por ejemplo, el informe de seguimiento de acuerdos con corte a junio de 2024 mostró 190 pendientes entre 2021 y 2024. Además, sobre las recomendaciones de la Unidad de Administración de Riesgos, apenas se registró un cumplimiento del 16% al corte de setiembre de 2024.
"Aunque el Órgano de Dirección debe garantizar que la función de auditoría interna cuente con la suficiente autoridad, prestigio, independencia, recursos y acceso al Órgano de Dirección, se evidencia que esa función está altamente comprometida por limitaciones en sus labores que le restan autoridad, independencia y a su vez le impiden ejercer su mandato de forma adecuada.
Por ejemplo, se determinan limitaciones en la oportunidad de acceder a información relevante (actas de junta directiva, comités, informes, minutas de reuniones, entre otros) que afectan el alcance y oportunidad de sus labores; situación que ha sido comunicada al Comité de Auditoría, pero que no ha generado que se adopten acuerdos para subsanarla".
El informe también reflejó desconfianza de algunos directivos hacia el auditor interno, cuestionado por presunta falta de objetividad en sus funciones.
Se señaló, además, que la asistencia del auditor a las sesiones de junta es limitada, que se redujo en un 60% el presupuesto de capacitación de su oficina sin justificación y que su calificación descendió en la última evaluación interna.
El documento subraya, asimismo, la falta de supervisión efectiva de la función de Cumplimiento Legal y Regulatorio (CLR), lo que impide a la directiva conocer el grado real de cumplimiento de leyes, regulaciones y normativa interna.
Según la Sugef, tampoco existe una supervisión efectiva del proceso de rendición de cuentas de la función CLR.
A estas alertas se suma la degradación de la calificación de Caja de Ande a Irregularidad I, la falta de idoneidad de la presidenta de la directiva, Dixie Campos Salazar, y de la gerente Carmen María Martínez Cubero, quienes según el informe no cumplen los requisitos para ocupar sus cargos.
Evaluaciones positivas
El informe también enumeró puntos favorables en la gestión de la entidad financiera:
- Gestión del Capital: Al corte de mayo de 2025, la Caja mantiene un Indicador de Suficiencia Patrimonial (ISP) de 47,65%, con Capital Nivel 1 (CN1) y Capital Común de Nivel 1 (CCN1) de 43,25%, y un Indicador de Apalancamiento (IAPE) de 46,91%.
- Evaluación de las Utilidades: Se ubica como la segunda institución con mayores utilidades en el Sistema Financiero Nacional al corte de mayo de 2025, con ¢57.694,1 millones, equivalente a una participación del 16,48%.
- Gestión de la Liquidez: Presenta una posición favorable gracias a que el 62,95% de sus activos se financian con aportes ordinarios de sus asociados, lo que reduce la dependencia de fondeo externo.
- Calidad de los Activos: Su marco de gestión de crédito e inversiones permite mantener estimaciones proporcionales al riesgo de dichos activos.
- Cartera de crédito: La morosidad a más de 90 días equivale a ¢11.862,88 millones, con un indicador de 0,93% al corte de mayo de 2025, cubierto 6,29 veces por las estimaciones registradas.
- Portafolio de inversiones: Se rige por políticas internas basadas en NIIF 9, con lo que evita exposición a riesgos relevantes.
Respuesta de Caja de Ande

Junta Directiva de Caja de Ande
CR Hoy consultó a la entidad sobre los nombramientos y las advertencias de la Sugef. Caja de Ande respondió sobre la salud de sus finanzas y su apego a la normativa nacional, pero no explicó las causas de los señalamientos de la Superintendencia.
"Al día de hoy, a sus 81 años es importante recalcar que, tanto nuestra liquidez financiera y posición patrimonial, mantienen una fortaleza reconocida y respaldada por una sana administración; información que puede ser verificada en el sitio web de la Superintendencia General de Entidades Financieras (SUGEF).
Desde la creación de Caja de ANDE, hemos trabajado de la mano con las entidades regulatorias que aportan oportunidades de mejora continua; lo que demuestra a nuestros accionistas que sus recursos están seguros y que pueden seguir confiando en esta entidad financiera.
Caja de ANDE, reitera su compromiso de administrar de manera segura y eficiente los recursos de nuestros accionistas".
Consultada sobre si adoptará medidas y cuál es la expectativa frente a la advertencia, Caja de Ande no se refirió al tema.
También se le preguntó por qué prorrogó, el 1 de octubre, el nombramiento de la presidenta de la junta directiva si la Sugef advirtió que no cumplía con el requisito de idoneidad en experiencia, uno de los ejes que afectó la calificación actual. La institución tampoco respondió esta consulta.
Consultada sobre este caso, la oficina de prensa de Sugef indicó que: "El artículo 132 de la Ley Orgánica del Banco Central nos prohíbe referirnos a aspectos específicos de cualquier supervisado por lo que no es posible contestar las consultas".