Tico internado en Brasil por pancreatitis aguda evoluciona favorablemente

Mauricio Ortega y su esposa, Angie Ortega en el hospital Miguel Couto en Brasil
Mauricio Ortega, costarricense internado en un centro público en Brasil tras ser diagnosticado con pancreatitis aguda, está respondiendo bien al tratamiento y ha mostrado mejoría en su recuperación.
Así lo confirmó su pareja, Angie Ortega, a CR Hoy mediante un mensaje que también difundió en redes sociales.
"Gracias a Dios está respondiendo bien al tratamiento, los exámenes muestran mejoría y desde ayer empezó una dieta suave. Han estado muy pendientes de él, incluso lo valoró un especialista en páncreas, quien confirmó que está respondiendo bien al tratamiento", declaró Ortega.
De momento, Mauricio no necesitará ser operado en Brasil, aunque sí requerirá una cirugía de vesícula en Costa Rica para evitar que esta situación se repita.
El mejor escenario prevé que el nacional, quien permanece en el Hospital Municipal Miguel Couto, en Río de Janeiro, reciba el alta este sábado. No obstante, esto dependerá de su evolución y de si logra "tolerar los alimentos".
Caso
La costarricense Angie Ortega Solano relató que vivió días de incertidumbre mientras esperaba los resultados médicos de su pareja, quien se encuentra internado en un centro público que, según denuncia, presenta condiciones insalubres y falta de atención adecuada.
"Fuimos a la farmacia a conseguir medicamento, pero no le mejoró. Tras reposar, se sintió aún peor y calificó el dolor como insoportable", contó Ortega.
Inicialmente, acudieron al Hospital Copa D'Or, en Copacabana, donde le diagnosticaron pancreatitis aguda. Sin embargo, ante la imposibilidad de pagar los 100.000 reales (cerca de $18.000) que exigía el hospital por el internamiento, fueron desalojados.
"Al decir que no podíamos pagar, le retiraron la vía intravenosa, la medicación, lo montaron en una silla de ruedas y lo sacaron", narró.
Una doctora del mismo centro les sugirió trasladarse al Hospital Municipal Miguel Couto, de atención gratuita, donde permanece internado.
No obstante, Ortega denuncia serias carencias en el servicio:
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El hospital se quedó sin médicos durante un fin de semana.
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La máquina de ultrasonido estaba dañada, por lo que no se le pudo realizar ese examen.
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Durante una crisis de vómito, Mauricio no recibió ayuda médica inmediata.
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La habitación presentaba condiciones antihigiénicas.
"Mauricio tuvo una crisis de vómito, se ahogaba con él y nadie pasó a ayudarlo. La habitación tenía un olor terrible; hasta las 7:00 a.m. vino el primer doctor y se encontró la habitación con vómito", denunció.
La costarricense aclaró que sí cuentan con un seguro médico vinculado a la tarjeta con la que se pagaron los boletos, el cual cubre hasta $150.000. Sin embargo, explicó que optó por un hospital público debido al temor de asumir gastos inmediatos en un centro privado.
"No fue porque no existiera cobertura, sino porque me dio temor asumir los gastos inmediatos en un hospital privado, ya que en esos casos primero se debe pagar todo de forma personal y luego esperar el reembolso. Yo no contaba con esa cantidad de dinero en ese momento, que eran $18.000 o 100.000 reales. Mi miedo era que después se presentara algún inconveniente con el reembolso o se lavaran las manos, lo que nos hubiera dejado sin recursos para poder trasladarlo de regreso a Costa Rica", aclaró.
Reiteró que su decisión buscaba "priorizar la seguridad de poder continuar con el proceso de atención y el traslado, sin el riesgo de quedar atrapados por una deuda hospitalaria".
Finalmente, desmintió que se esté solicitando dinero vía SINPE Móvil.
"El único objetivo es clamar por ayuda en una situación de salud complicada y poder regresar a Costa Rica para que Mauricio continúe su recuperación allá", concluyó Ortega.