Los capibaras que se encuentran en el centro de rescate Wildlife ZoAve, en La Garita de Alajuela, han causado sensación en las redes sociales. Aunque su estado de salud es muy bueno, los especialistas aún tienen un detalle pendiente: ponerles nombre.
¿Cómo se llaman? Aún no tienen nombre. La veterinaria Isabel Hagnauer explicó, durante una reciente visita de CR Hoy al centro, las razones por las cuales no han sido bautizados y los aspectos que se toman en cuenta para asignarles un nombre.
No los hemos nombrado. Estamos en ese proceso de reconocerlos a través de algunas características individuales. Aunque cada uno tiene un microchip, buscamos rasgos físicos que nos permitan diferenciarlos fácilmente.
Agregó que pronto encontrarán la forma de asignarles un nombre a cada uno y, una vez bautizados, lo comunicarán al público.
El centro tiene la costumbre de nombrar a varios de los animales para que las personas puedan reconocerlos con facilidad. Uno de los casos más recordados es el de Grecia, el tucán que llegó en 2015 con el pico superior amputado. Se le fabricó una prótesis a su medida para salvarle la vida. Aunque se recuperó satisfactoriamente, falleció en 2022 debido a su vejez.
Actualmente, el refugio está a la espera de la aprobación del Sistema Nacional de Áreas de Conservación (Sinac) para que los costarricenses puedan visitar a las tres capibaras hembras y al macho que se quedarán viviendo en el centro. Estos animales habitarán una zona adaptada a sus necesidades, luego de superar la cuarentena, tras haber sido descubiertos a finales de mayo, cuando eran transportados de contrabando en un vehículo detenido por la Fuerza Pública durante una revisión en Orotina.