Yendry y María Jesús lucharon por sus sueños y rompieron barreras
Jiménez dejó Pérez Zeledón para estudiar Ingeniería Industrial.
Cada día hay más mujeres que derriban barreras y rompen estereotipos con sus logros y su esfuerzo desde la ciencia hasta el deporte, inspirando a otras para que sigan luchando por sus objetivos y sueños.
Yendry Carvajal y María Jesús Jiménez no son la excepción. Ellas son dos mujeres que se esfuerzan cada día para dar lo mejor de sí mismas en sus trabajos y que otros se sientan orgullosos de sus aportes.
Ambas son operadoras de montacarga de Gallito y Dos Pinos y desde que laboran en dichas empresas, su trabajo ha causado una buena impresión al punto de ganarse el respeto de sus compañeros.
En el marco del Día Internacional de la Mujer, este medio tuvo la oportunidad de conocer sus historias.
Dejó el nido familiar en busca de su sueño
Jiménez es una joven de 23 años que entró a la Cooperativa Dos Pinos hace aproximadamente 2 años para hacer una pasantía. Su aporte a la empresa la llevó a conseguir un puesto en Gallito como operadora de montacargas.
Para desempeñarse en su puesto, ella -quien es Ingeniera Industrial- tuvo que obtener la licencia para poder manejar la maquinaria.
"Al obtener el puesto yo vi que mi equipo necesitaba ese apoyo (…) entonces empecé a practicar y decidí que tenía que tener esa licencia", dijo.
Ese esfuerzo y valentía lo traía desde que dejó el nido familiar en Pérez Zeledón y se mudó a Cartago para estudiar su carrera en el TEC. Ahora Jiménez -quien se graduó de la universidad- vive en Alajuela y va a su trabajo con el deseo de seguir superándose y aprender más cosas de esta industria.
Jiménez comentó que al principio su mamá temía que algo le pasara porque se iba a mudar lejos de su hogar.
"Ella me dijo que no, que no le parecía, que era muy peligroso que yo me viniera sola porque tenía 21 años (…) pero yo tenía un sueño. Yo quería estar aquí y empezar a trabajar desde joven para abrirme más puertas", contó.
La joven comentó que cuando se mudó a Alajuela, no conocía la zona, pues nunca había pisado el pie en la provincia.
"Al principio fue un poco desafiante porque yo me vine y le dije a mi mamá: ‘Me dieron la oportunidad de ser practicante en Dos Pinos- No sé ni dónde está la Dos Pinos -porque nunca había venido de Alajuela- pero yo me voy'", recordó.
"Siento que todos esos obstáculos o dificultades -que hacen que los objetivos sean un poquito más difíciles de lograr- le enseñan a uno a valorar más lo que ha logrado", añadió.
"Me siento muy orgullosa y me hace sentir realizada y empoderada porque ahorita estoy a cargo de 5 personas y todos son hombres, entonces ganarse ese respeto y demostrar que yo también puedo manejar como ellos, me hecho hacer la diferencia, poder hablar a mis compañeros y decirles no, ustedes también pueden, hagamos la diferencia. Yo siempre he dicho que si uno quiere algo, es cuestión de práctica y actitud ,entones me siento orgullosa de haber puesto esos valores y actitudes de hacer lo que estoy haciendo ahorita", expresó la joven.
"Nunca es tarde para empezar"
La oriunda de Pérez Zeledón dejó un mensaje importante parra las mujeres, con el deseo de inspirarlas e impulsarlas a estudiar "algo nuevo que tal vez no está establecido por mujeres".
"Nunca es tarde para empezar y que nunca se den por vencidas y si quieren algo que les han dicho que no pueden, demuestren que si pueden inténtelo, practiquen", dijo.
"A veces fracasar a uno u obtener algún error cuando están en el aprendizaje lo ciega de no volverlo intentar, pero no, de los errores aprenden. Entonces que nunca es tarde para comenzar y que nunca se den por vencidas, así van a lograr todo lo que se proponen en esta vida y que no tengan miedo. Porque si yo hubiera tenido miedo ese día que mi mamá me dijo que no me fuera tan joven a un lugar tan grande y tan peligroso, no estaría aquí. No me arrepiento, pues no tuve miedo y aquí estoy aquí", agregó.
Quiere inspirar a sus hijos
La otra mujer que ha sabido superarse es Carvajal. Ella es una joven de 31 años y madre de 5 hijos -el mayor tiene 16 años y la menor 5 años- que ha trabajado en panadería y manufacturas.
Carvajal es relativamente nueva en la Cooperativa Dos Pinos, ella entró a trabajar hace 3 meses y desde entonces, se ha sentido muy orgullosa de sus logros.
Además, está muy feliz al ver que sus hijos están orgullosos de ella al punto de que hablan sobre ella y su trabajo con otras personas y también le preguntan cómo se hace ciertas cosas. Ella comentó que, como madre, desea inspirar a sus hijas.
"Empecé como una manera de ser un ejemplo para mis hijas, más que todo; obviamente por mi misma, pero siempre quise ser un ejemplo para ellas", dijo.
Por otra parte, ella -quien es vecina de Ciruelas de Alajuela- expresó que se siente muy orgullosa de sí misma.
"Me siento muy orgullosa de mi misma porque era una industria para industria. Cuando llegué yo todo el mundo me decía usted va a romper paradigmas y hacer algo diferente y así ha sido y me siento muy orgullosa y agradecida de que me dieran la oportunidad de demostrar", dijo.
Cuando ella empezó a laborar como operadora de montacarga, no recibió mucho apoyo por parte de sus compañeros y algunos familiares.
"Algunos compañeros que tal vez no lo ven a uno con esa capacidad, que tal vez no lo ven a usted que puede hacerlo como ellos o hasta mejor que ellos. Entonces eso fue muy duro en su momento. También cuando inicié el curso, algunos familiares no me apoyaron", indicó.
Sin embargo, eso no la frenó. Ella dio todo lo mejor de sí misma para superar las expectativas de otros.
"Me considero como una persona en constante crecimiento", señaló.
Le gustaría capacitar a otras mujeres
Carvajal es una mujer que ha soñado trabajar en esta industria desde que tenía 9 años, ya que ella veía la estabilidad laboral y económica, así como su crecimiento personal, cuando laboraban en la cooperativa.
Ella ha sabido superarse y ha aprendido cosas nuevas que le han ayudado a ser mejor persona y empleada al punto que le gustaría realizar capacitaciones.
Comentó que en un futuro le gustaría capacitar a otras mujeres para que puedan hacer las labores en esta industria.
Asimismo, ella dejó un mensaje a las mujeres, aconsejándolas a que no se rindan e ignorar las malas críticas que lo frenan a uno a hacer lo que quiera.
"No importa lo que la gente diga: ‘No se meta en eso, no puede, eso es para hombres, que miedo le puede pasar algo'. No, no, no. Esto es lo que me gusta, soy capaz de hacerlo y para allá voy. Creo que para mí eso es como el el mensaje que dejaría: ‘Soy capaz, yo puedo independientemente de lo que la gente alrededor diga. Nadie conoce de lo que soy capaz más que yo misma", dijo.